Rusia libera a la jugadora de baloncesto estadounidense Brittney Griner a cambio del traficante de armas Viktor Bout
Intercambio histórico
Se trata del canje de prisioneros de mayor perfil entre Washington y Moscú desde el fin de la Guerra Fría
Quién es Víktor Bout, el traficante que Rusia ha canjeado por la jugadora de baloncesto de EE.UU.
Guerra Ucrania - Rusia, en directo
En esta imagen de un vídeo proporcionado por el Servicio Federal de Seguridad Ruso, Brittney Griner se sienta en el avión mientras vuela a Abu Dhabi para ser canjeada por Viktor Bout
Vuelve a casa por Navidad. El viejo lema de los turrones se hace realidad con Brittney Griner. La estrella del baloncesto estadounidense regresará a su país, liberada de la colonia penal rusa en el que estaba encerrada por supuesto tráfico de cannabis, después de que la administración Biden ha alcanzado un acuerdo de intercambio con el traficante de armas Viktor Bout.
Biden aprobó el acuerdo, que se negoció en los Emiratos Árabes Unidos, aunque esto significa que en Rusia continuará detenido el ejecutivo Paul Whelan, acusado por cargos tan irrelevantes como Griner, a los que condenaron por poseer escasos gramos de marihuana.
Este pacto significa el intercambio de mayor perfil entre Washington y Moscú desde el fin de la Guerra Fría. Bout ha cumplido once años de la pena de 25 años que se le impuso en EE.UU.
El regreso al hogar de Griner, condenada a nueve años de cárcel, cierra una peripecia de varios meses, que arrancó en febrero, poco antes de que el presidente Vladimir Putin ordenara la invasión militar de Ucrania. A ella la detuvieron en el aeropuerto de Moscú, con unos cartuchos de aceite de marihuana para vapear en su equipaje.
Griner, de 32 años, estrella de los Phoenix Mercury y que también jugaba en la competición rusa, ha sido objeto de una larga negociación que han evidenciado la tensa relación entre los dos países.
El pasado 9 de noviembre, Biden prometió que Griner volvería pronto con los suyos.
“Estos nueve meses han sido los más oscuros de mi vida, y ahora estoy aquí desbordada por la emoción, pero la emoción más importante que tengo ahora es la de la gratitud hacia el presidente Joe Biden y toda su administración”, afirmó Cherelle Griner, la esposa de Brittney en una comparecencia celebrada la mañana de este jueves en la Casa Blanca. El presidente y la vicepresidenta Kamala Harris estaban a su lado.
Estos nueve meses han sido los más oscuros de mi vida, y ahora estoy aquí desbordada por la emoción"
“Solo puedo decir que este trabajo no ha sido fácil y ha implicado a muchos”, señaló. Pero lamentó que hay otras muchas familias que “no pueden estar al completo y, en nombre de Brittney, os aseguró que seguimos comprometidas con el trabajo de que todos los estadounidenses regresen a casa, incluido Paul (Whelan)", recalcó.
Cherelle pronunció estas palabrea después de que Biden justo hubiera acabado el anuncio de que había hablado con Brittney. “Está en el avión, de regreso a su hogar”, subrayó el presidente.
"Después de meses de estar injustamente detenida en en Rusia, retenida bajo circunstancias intolerables, Brittney pronto estará en casa en brazos de sus seres queridos, donde ella debería haber estado siempre”, afirmó el presidente.
Agradeció a su equipo y a los Emiratos el esfuerzo realizado. “Este es un día para el que hemos trabajado durante mucho tiempo”, insistió. “Nunca dejamos de luchar por su liberación y esto supuso dolorosas e intensas negociaciones”, añadió.
Un recuerdo para Paul Whelan
Reconocimiento y reivindicación
Explicó que de la conversación que había mantenido con la deportista, dos veces medalla de oro en los juegos olímpicos con el equipo de Estados Unidos, certificó que se encontraba con buen ánimo y pidió que se le dejó espacio y tiempo para la recuperación de este golpe “con dignidad”. “Representa lo mejor de este país”, sostuvo.
Y remarcó que “nunca nos hemos olvidado de Paul Whelan, que también está injustamente detenido en Rusia por años”, aclaró. Matizó que, a diferencia de la atleta, no se ha disfrutado de la misma suerte con el ejecutivo, pero “no lo vamos a dejar”, prometió, con el recordatorio de que su administración ha traído de regreso “a decenas de estadounidenses indebidamente detenidos y mantenidos como rehenes en Rusia y otros lugares”.
Concluyó urgiendo a todos sus compatriotas a que tomen precauciones cuando viajan al extranjero y que hagan caso de las indicaciones del Departamento de Estado sobre los riesgos de cada trayecto en concreto.
Rusia también festejó la liberación de Bout. Su ministro de Exteriores, Sergei Lavrov, señaló en un comunicado que el intercambio se había realizado “con éxito” en el aeropuerto de Abu Dabi. “Por fin puede regresar a su hogar”, afirmó en relación al convicto traficante de armas conocido como “el mercader de la muerte”.
A sus 55 años, Bout, ex oficial del ejército soviético, en su momento el hombre más buscado del mundo, cumplía condena en la prisión de Marion (Illinois), en una restrictiva unidad que se conoce como la “pequeña Guantánamo”.
Caracterizado por su mostacho, capaz de hablar seis idiomas, fue sentenciado, tras su detención en Bangkok en el 2008 y extradición en el 2010, por vender armas a Al Qaeda, a los talibanes y grupos de rebeldes y terroristas que alimentaron conflictos en África, Asia, Oriente Medio y Sudamérica, así como por conspirar para matar a estadounidenses.
A Bout se le consideró el forjador de un imperio global en el contrabando de armas. La película El señor de la guerra , del 2005 y protagonizada por Nicholas Cage, se inspiró en él.
Viktor Bout, quien fue canjeado por Brittney Griner, habla en un avión ruso luego de un intercambio, en el aeropuerto de Abu Dabi
Mientras los demócratas celebraban la noticia de la liberación de Griner, sectores de la derecha estadounidense acusan al presidente de ceder ante Rusia, de haber intercambiado a una atleta por un traficante de armas. “¿A cuanta gente matará Bout ahora que Biden le ha dejado libre?”, planteó la ultra conservadora Marjorie Taylor Greene. Según esta legisladora, esta es otra razón para plantear el 'impeachment' del presidente. También hay quejas porque no se ha liberado a Whelan, ex marine de 61 años y ejecutivo de una empresa de seguridad, que fue condenado a 14 años de prisión por hallarle un cartucho de marihuana en su viaje por Rusia.
Algunos oficiales del Pentagono expresaron su preocupación de que Bout “vuelva a sus actividades de tráfico de armas, potencialmente alimentando conflictos en el mundo”. El senador Bob Menendez, demócrata que presidente de la comisión de relaciones exteriores, reconoció que “no podemos ignorar que es una decisión profundamente perturbadora” la libertad de Bout.
“Es un regalo para Putin”, tuiteó Kevin McCarthy, líder de los republicanos en la cámara baja. Y valoró que “dejar atrás” a Whelan “es excesivo”.
Altos cargos del gobierno señalaron en rueda de prensa telefónica que Rusia que Viktor Bout era “la única ruta” para la liberación de Griner. Expresaron su confianza de que ahora se mantenga el canal abierto para proseguir la negociación por el ex marine.
En este sentido, Anntony Blinken, secretario de Estado, respondió que la única razón de que no se le haya incluido en el canje a Whelan se debe única y exclusivamente a Rusia y a su presidente Vladimir Putin. “La elección era uno o ninguno”, recalcó. Y ese uno solo podía ser Griner para los rusos. “No hay nada que nos habría gustado más que traer hoy los dos de vuelta en el mismo avión”, apostilló.
Whelan, en coversación con la CNN desde su reclusión, se mostró decepcionado con Biden. “Fui detenido por un crimen que nunca cometí, aún no sé por qué sigo aquí”, dijo. Su hermano, David, explicó en un comunicado que el gobierno les avisó de que él no figuraba en el intercambio.
David quiso dejar claro que no critican la libertad de Griner. “Como he dicho en más de una ocasión, los casos de Brittney y de Paul nunca se entrelazaron. Siempre hubo una fuerte posibilidad de que uno pudiera ser liberado sin el otro”. Lo que no quita que la incapacidad de traerlo a él a casa “resulta difícil de procesar para la familia”