Kiko Rivera se reúne con sus hermanos Francisco y Cayetano en plena tormenta por el legado de Paquirri

Están siendo días muy complicados para Kiko Rivera por el todavía latente conflicto con su madre Isabel Pantoja por la gestión del legado de Paquirri, y parece que el dj ha decidido respaldarse en la otra rama de la familia, los Rivera, para superar la crisis y encontrar algo de apoyo.

Como se ha podido ver este mismo miércoles en su perfil de redes sociales, el hijo de la tonadillera y el malogrado torero, fallecido hace ya 36 años, se ha reunido con los dos hijos del diestro y Carmina Ordóñez, Francisco y Cayetano Rivera, para pasar el día y hacer una pequeña excursión.

Además de una bonita fotografía de los tres hermanos que todos ellos han compartido como publicación (y puede que como advertencia de su unión a Isabel Pantoja) en su perfil de Instagram, los Rivera tampoco han dudado en contar a sus seguidores que hoy han visitado a su tío José Rivera ‘Riverita’, el hermano de Paquirri al que Kiko todavía no había podido conocer.

“Bueno, en el cielo hoy hay alguien que estoy seguro de que debe estar muy contento. Venimos de ver a nuestro tío José, que está muy malito. Y hemos pasado un día buenísimo con él”, ha asegurado Francisco en referencia a su padre, tras lo que Kiko ha bromeado con el hecho de haber sido el conductor a la ida y la vuelta de Barbate (Cádiz), donde vive su tío.

Compartiendo el mismo vídeo también en sus historias de Instagram el mayor de los Rivera-Ordóñez ha asegurado que, después de años de distancia con su hermano y de conflicto con Isabel Pantoja por su parte de la herencia de Paquirri, finalmente “todo empieza a estar en su sitio”.

Por todo lo que ha estado sucediendo desde que se desatara la guerra con la tonadillera hace ya varias semanas, los hermanos de Kiko Rivera, junto con su esposa Irene Rosales,se han convertido en su mayor apoyo. Según dijo el dj en su participación en el especial sobre Cantora el pasado viernes en Telecinco, siempre había pensado que no le importaba a la familia de su padre supuestamente por culpa de su madre.

“Me he pegado toda mi vida pensando que no me querían ni mi abuelo, ni mis tíos y que mis hermanos no querían verme… era lo que me contaban… Es muy triste. Es muy triste… porque no sé cómo se puede recuperar ese tiempo”, aseguró entonces Rivera, que ahora parece estar superando la decepción inicial y recuperando el tiempo perdido con los suyos.