Inés Arroyo: “Sabía desde el principio que Instagram era un puente hacia algo más”
Entrevista
La empresaria celebró su éxito con un ‘afterwork’ de amigos de Laagam en Mr Porter Barcelona
Inés Arroyo fue una de la primeras influencers en destacar en España. Capitaneó el grupo de chicas que se hicieron famosas a través de las redes, pues su cuenta de Instagram subió de seguidores hasta el punto que cualquier joven chica de Barcelona conocía su nombre, y lo usó bien. No se limitó a subir conjuntos de otros a la red y su vocación de empresaria la llevó a lanzar su propia marca, Laagam. Este jueves la firma organizó un afterwork en Mr Porter Barcelona, entre otras cosas, para celebrar su éxito como una de las marcas emergentes en esta industria “tan competitiva”.
Flanqueada por sus dos socios, Diego Arroyo y Christian Badía, la influencer demostró que se mueve como pez en el agua en los saraos, y es que como ha reconocido en esta entrevista es experta en “montar fiestones”. Repleto de influencers y de caras conocidas de la ciudad, este hotel cercano a Passeig de Gràcia acogió el informal afterwork de amigos que contó con actuación en directo de Marc A. Torras.
Su negocio hace tiempo que dejó de ser solo la moda. Tiene una marca de ropa, otra de vinos, también hace de entrevistadora en Radio Dazz, va a ser profesora de universidad y mantiene actualizada una cuenta de Instagram, que no es nada fácil. ¿Cuándo descansa Inés?
Soy una persona muy inquieta, me gusta mantenerme activa y no paro. Me gusta emprender nuevos proyectos. Seré profesora del Máster en marketing digital e-comerce, que va ser el primer año que se haga en la Universitat de Barcelona. Pero a lo que dedico el cien por cien de mi tiempo es a Laagam. Me gustaría dedicarme más a Vinos Reilón, pero no me da para todo. En mi Instagram sigo trabajando para otras marcas e intento cuidar y mantener mi comunidad, porque gracias a ellas he podido emprender y dedicarme a lo que quiero.
Mucha gente piensa que su especialidad es la moda, y seguramente lo sea, pero estudió empresariales. ¿Qué cree que ha sido más importante para crear Laagam? Su talento como diseñadora o su faceta de empresaria.
Ha sido un híbrido de esas dos cosas. Es importante tener la visión business, saber que los cimientos de una empresa son su business plan, los objetivos y tener la parte numérica muy asentada. Por otro lado, también he tenido que desarrollar mi parte creativa, estudié en Londres varios veranos. Ese conjunto ha sido el que me ha hecho saber cómo crear una empresa en este sector tan competitivo.
Lo decía porque hay muchas influencers en España en estos momentos con millones de seguidores pero da la sensación que es la que mejor lo monetiza…
No creo que sea yo la que mejor lo monetiza (ríe). Pero desde que empecé en el mundo de los influencers tenía muy claro que Instagram era solo una plataforma, un puente para algo más. También ha sido algo más que eso, no solo una fuente de ingresos. Siempre he querido aportar algo, un valor añadido.
El feminismo es algo de lo que es abanderada confesa, ¿apoya alguna otra iniciativa o movimiento?
A parte del feminismo, que es uno de los valores fundamentales de Laagam, estoy intentando aplicar valores ecológicos a la marca. Hay que ser conscientes de cómo se trata cada producto. Usar menos agua, hacer menos muestras, intentar usar materiales responsables… Es algo que yo también me estoy aplicando como consumidora de moda, porque no quiero ser una hipócrita. Personalmente quiero dar voz a este tipo de iniciativas.
“Ningún político me representa. Es feo que se hable de igualdad cuando no ha habido ninguna mujer presidiendo este país”
Inés Arroyo,
‘influencer’
La pregunta es obligada por las elecciones de este domingo. Si se tuviera que ir de afterwork con algún político, ¿con cuál sería y por qué?
Es muy duro porque ahora mismo nadie me representa. Me parece feo que algunos políticos hablen de igualdad cuando no ha habido nunca una mujer presidiendo este país. Si me tuviera que ir con uno… ¡No! Me iría con cualquier política mujer, sin importar el partido ni el color.
Muchas personas le seguirán desde hace años, ¿cree que la conocen realmente como es?
Yo creo que me conocen muy bien y que soy una persona muy natural en Instagram, tal cual trasmito. No estoy todo el día hablando en redes porque quiero mantener mi vida personal apartada, para mi esto es algo más profesional. No creo que hablando de mi vida personal inspire a nadie y creo que puedo inspirar más a través de la moda.
“No creo que hablando de mi vida personal inspire a nadie”
Desde jovencita contó con la atención de mucha gente, todas las jóvenes de la ciudad sabían quién era, ¿ha dejado de hacer algo que le hubiese gustado porque sabía que recibirías críticas?
No he dejado de hacer nada. Mi vida no ha cambiado nada en este sentido. He hecho todo lo que tenía que hacer en la universidad, en la fiestas, en los viajes… Lo único que sí he echado de menos ha sido hacer un Erasmus. Me salió una oportunidad de prácticas en empresa i tuve que elegir. Esa es la espinilla que tengo. Pero mi vida ha sido siempre igual, sigo teniendo las mismas amigas y la misma gente, creo que es importante mantener eso.
“Me hago 120.000 fotos y de esas elijo una, ese es mi consejo para posar frente a la cámara”
¿Para ser infuencer hay que salir siempre a la calle perfecta?
No. Soy una persona que me gusta ir bien vestida, no soy la típica que va en chándal al aeropuerto. Ha sido así de toda la vida, no es por ser influencer. Yo por ejemplo con el maquillaje soy una persona totalmente nula, soy súper natural. Cada una en su estilo y todo el mundo sabe que los influencers somos personas normales, por eso tenemos los seguidores que tenemos, sino la gente seguiría solo a modelos.
¿Algún consejo para posar frente a la cámara para Insatgram?
Me hago 120.000 fotos y de esas elijo una, ese es mi consejo (Ríe). Es algo que aprendes con los años, te inspiras como posar y ya te conoces tu lado bueno. Pero el 90 % de las influencers, como no somos modelos, detrás de esa foto que ves en Instagram ha habido 150 ráfagas de iPhone. Elegimos la que más nos gusta, pero eso lo hace todo el mundo.
“Instagram empezó siendo algo como de estar por casa y ha acabado siendo un trabajo más”
Fue una de las primeras influencers en destacar en España. Con todos estos años de trayectoria ¿ha cambiado algo en la red social desde que empezó?
Sí que ha cambiado, cuando yo empecé nadie se pensaba que eso podría ser una fuente de ingresos. Nadie pensaba que se podía hacer marketing a través de Instagram. Empezó siendo algo como de estar por casa y ha acabado siendo un trabajo más, ahora hay instrumentos para medir que impacto real ha tenido un influencer en la venta de un producto, ¡hay mucha lata aquí! La gente también está dejando de leer revistas de moda para mirar Instagram y ver gente normal, que es lo que quieren ver.
Veo mucho trabajo Inés, ¿con qué ayuda cuenta? ¿Tiene socios?
Obviamente tengo socios, somos tres, entre los que están mi hermano, Diego Arroyo, y Cristian Badía, otra persona muy cercana a mi. Laagam es lo que es gracias al equipo que somos. Somos como una mesa con tres patas y si se cae una ya no sería lo mismo.
Algo que la diferencia de muchas otras influencers españolas es que no cuenta lo que hace en su día a día. Elige qué mostrar y qué no. ¿Es para proteger su intimidad?
Totalmente. A mi pareja le saco muy de vez en cuando. Es algo que quiero mantener aparte, a mi familia también. Mis amigas que no quieren salir no salen y si quieren salir todo el día pues les saco. Mi vida personal prefiero mantenerla al margen por lo que te contaba antes, no creo que inspire a nadie.
Algún día se casará… ¿Será un gran acontecimiento o algo privado?
Me encanta festejar, monto fiestones para mi cumpleaños rodeada de los míos. Otra cosa es hacer algo muy público. Nunca digas nunca pero no me veo vendiéndolo, no lo he hecho nunca. Compartiré con mis seguidoras las cosas que puedan inspirar, como mi vestido. Pero no creo que lo haga ser gran acontecimiento, no soy ese tipo de persona, me gusta que sea más privado. Es un día que quiero que sea para mí, mi pareja y los míos.
Ya he visto que se ha mudado de casa, ¿va a cambiar la moda por la decoración esta temporada?
(Ríe) A lo mejor si porque el dinero no da para tanto, tienes que decidir. La decoración me ha gustado mucho de siempre. La decoración es un arte que va muy ligado a la moda. Mi madre me lo ha inculcado desde pequeña. Ella pinta y es una inspiración para mi. Lo de la casa nueva es una ilusión, me paro en todas las tiendas de decoración. También ahora cuando voy de viaje me traigo algo, sea lo que sea.