“Los grocerants han llegado para quedarse, y si no sabes lo que son, probablemente ya te hayas topado con ellos sin darte cuenta”, comenta Pablo Foncillas. Con este nombre, el profesor de escuela de negocios se refiere a los establecimientos que son híbridos entre tienda de alimentación y restaurante y que responden al deseo del consumidor de adquirir producto fresco, regional y sostenible de manera rápida y lista para consumir.
Una moda a la que se han apuntado los supermercados, compitiendo así con los restaurantes. A este fenómeno, que “está revolucionando el consumo”, se han apuntado cadenas de supermercados como Mercadona y Bonpreu, aunque ya lo había puesto en práctica Ikea desde la década de los sesenta. Fórmula que los supermercados “han tardado décadas en asimilar”.
Este modelo expansivo, no obstante, “representa un quebradero de cabeza” para el sector horeca -hostelería, restauración y catering-, una dificultad añadida a la pérdida de rentabilidad por la inflación y el aumento de los costes laborales.