El ecosistema digital de Barcelona suma una nueva empresa unicornio : Factorial, una start-up especializada en un software de recursos humanos para pymes. En plena sequía inversora, la compañía ha conseguido entrar en el club privilegiado de empresas que valen más de 1.000 millones.
Supone todo un hito para el ecosistema español, capitaneado por otras cuatro empresas unicornio: Wallbox y Travelperk, nacidas en Barcelona, y Cabify y Jobandtalent, en Madrid. Con la entrada de Factorial en este club, la capital catalana supera a la española en cifra de unicornios. Históricamente siempre había sido así pero las dos ciudades llevaban meses empatadas porque la barcelonesa Glovo perdió la valoración a mediados de este año, al hundirse en bolsa el valor de su matriz, Delivery Hero.
En el caso de Factorial, la obtención de esta valoración ha sido gracias al cierre de una ampliación de capital de 123 millones de euros. La operación ha sido liderada por el fondo británico Atomico con la participación de GIC y todos los inversores que habían entrado en rondas anteriores, como Tiger Global, CRV, K-Fund y Creandum.
Ampliación de capital
La empresa ha cerrado una ronda de 120 millones liderada por Atomico
“Queremos ser uno de los líderes globales del mercado de los servicios digitales de recursos humanos. Pensamos que todavía hay camino por recorrer. Muchísimas pymes todavía no utilizan tecnología para la gestión integral de las facturas, las nóminas o los horarios”, apunta Jordi Romero, consejero delegado de Factorial y cofundador del negocio junto a Bernat Farrero y Pau Ramon.
La compañía invertirá el dinero en crear funcionalidades tecnológicas y fortalecer su presencia en los mercados donde ya opera: España, el Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, Italia, Portugal, Francia, México y Brasil. “No descartamos adquisiciones de competidores. El objetivo es focalizarnos en los países donde ya operamos porque la oportunidad es enorme. Ahora tenemos 7.000 clientes y el mercado potencial es de diez millones de empresas”, señala Romero, que junto al resto de fundadores seguirá al frente de la dirección del negocio, pese a haber perdido la mayoría del capital.
Estrategia
La compañía prevé fortalecer su presencia en los 9 mercados donde opera
La compañía nació en el año 2016 en Barcelona, aunque el negocio empezó a despegar tres años más tarde. “Empezamos ofreciendo el software de forma gratuita y cobrando comisiones en algunos servicios, pero el modelo fracasó porque necesitaba captar un volumen demasiado grande de clientes. Así que decidimos cambiar y exigir una cuota de forma regular”, apuntaba Romero en una entrevista reciente en La Vanguardia .
Con este modelo, la compañía ha triplicado las ventas año tras año. “En el 2020 facturamos tres millones, en el 2021, ingresamos diez, y este año prevemos alcanzar los 30 millones”, aseguraba el consejero delegado, quien indica que la empresa volverá a triplicar esta cifra en el 2023. En cuanto a la rentabilidad, Factorial nunca ha obtenido beneficios anuales, y de momento no tiene horizonte para conseguirlos porque está enfocada en invertir los recursos en crecimiento.
Una de las principales áreas de inversión es la contratación de trabajadores del mundo tecnológico. Actualmente, Factorial emplea a 800 trabajadores, repartidos entre la sede central de Barcelona y las delegaciones de Brasil y México. Próximamente, la compañía espera abrir una oficina en Miami (EE.UU).
De cara al futuro, Romero confía en mantener el negocio independiente en el mercado privado. Considera que ahora no es buen momento para salir a bolsa y asegura que la compañía no está en venta. Haber conseguido una valoración de 1.000 millones, a pesar de la coyuntura desfavorable y una cifra de facturación modesta, certifica que los inversores confían en las expectativas de crecimiento de su negocio.