El grupo Volkswagen ha descartado Catalunya para ubicar su gigafactoría de baterías española. También ha descartado Aragón, por lo que la decisión se encuentra ahora entre Sagunt (Comunidad Valenciana) y Extremadura, según explicaron a este diario fuentes cercanas al grupo alemán.
Aunque la decisión no se ha oficializado todavía, el Govern de la Generalitat ya ha sido informado sobre el descarte de la propuesta catalana, que se argumenta en gran parte por el deseo de repartir por el territorio las fuertes inversiones que prepara Volkswagen para la transformación tecnológica de su negocio en España. Aun sin planta de baterías, Catalunya se llevaría la mayor parte, con la adjudicación del futuro vehículo eléctrico de pequeño tamaño que en principio fabricará con marca Seat, Cupra y Skoda. Y en materia de baterías, contará con el centro de diseño: se presenta el miércoles en Martorell y será el único centro de estas características para el desarrollo y prueba de baterías en el sur de Europa.
Catalunya también albergará la planta de ensamblaje y de reciclado de las baterías, muy probablemente en la planta de Seat en la Zona Franca. Y el comité de empresa, que encabeza Matías Carnero, está batallando por que los motores para el coche eléctrico se ubiquen en la planta de Seat en El Prat.
Lo que no tendrá Catalunya es la planta de celdas, el corazón de lo que después es la batería, y que salvo sorpresas se construirá en Sagunt o en Extremadura. Dependiendo de su tamaño, una planta de celdas supone una inversión de entre 2.000 y 3.500 millones, y entre 3.000 y 5.000 empleos directos.
“No nos consta que el grupo Volkswagen haya tomado una decisión definitiva en relación con la ubicación de la fábrica de celdas de baterías, pero seguimos trabajando intensamente con la compañía para que la mayoría de los elementos de la cadena de valor del coche eléctrico se instale en Catalunya”, señalaron fuentes del Departament d’Empresa y Treball, que dirige Roger Torrent.
La Generalitat negocia con otros fabricantes para disponer de una factoría a medio plazo
“La prioridad del Govern es asegurar la fabricación del vehículo eléctrico en Martorell porque es lo que garantiza el futuro de Seat y el liderazgo de Catalunya en la industria de la movilidad sostenible”, añadieron. El coche eléctrico, destacaron, es “el elemento más importante de toda la cadena de valor, lo que requiere mayor inversión, garantiza más empleo y genera un efecto arrastre más relevante”. Por eso, el Govern considera una “excelente noticia” el anuncio hecho el jueves por Volkswagen respecto a la fabricación del coche eléctrico en Martorell.
En cualquier caso, al margen de las relaciones con VW y Seat, la Generalitat mantiene contactos con diversas empresas a las que “se ha hecho la mejor oferta posible en cuanto a ayudas públicas, localización, suministros, conectividad, perfiles profesionales y calendario de desarrollo de los terrenos para atraer a Catalunya fábricas de celdas de baterías”, según fuentes de Empresa. “No descartamos que a medio plazo alguna de estas empresas se instale en Catalunya”, concluyeron.
Una gigafactoría de celdas supone la creación de entre 3.000 y 5.000 empleos directos
Respecto a las dos opciones que hoy por hoy siguen en pie, fuentes conocedoras de las deliberaciones explican que Volkswagen tiene una ligera preferencia por Sagunt, porque valora sus buenas comunicaciones en comparación con Extremadura y también la disponibilidad de personal cualificado. Sin embargo, el Gobierno central apuesta más por Extremadura para compensar el problema de la llamada España vaciada y también para evitar el malestar que inevitablemente provocará que la comunidad se dedique a la extracción de litio, con los consiguientes problemas medioambientales que ello implica, mientras la gran creación de empleo se desplaza a otras zonas. “Sería la fábrica en mayúsculas de Extemadura”, destacan las mismas fuentes. Como ubicación geográfica, solo juega a su favor su mayor cercanía a la planta portuguesa de Volkswagen.
El Ministerio de Industria insiste, no obstante, en que se trata de una “decisión estrictamente empresarial” y niega interferencias en la decisión.
Portavoces de Seat rehusaron comentar los resultados de la selección y señalaron que el proceso aún no ha concluido. “Los requisitos tecnológicos, logísticos y económicos para la localización de una fábrica de baterías son muy exigentes”, aseguraron fuentes de la empresa que preside Wayne Griffiths. “Se evalúa una variedad de premisas y factores para identificar las ubicaciones más adecuadas para el Grupo Volkswagen y su red de producción”, añadieron.
Salvo sorpresas, la decisión del grupo es fabricar en España unos 900.000 coches eléctricos al año, 500.000 de ellos en Martorell y el resto en Navarra.