Una orientadora laboral, Desirée Parramón, decidió compartir a través de la plataforma de LinkedIn algunas anécdotas curiosas y sorprendentes que ha experimentado durante su trayectoria profesional. En estas historias, Parramón revela que, desde que empezó a revisar los currículums, se ha encontrado en situaciones tan extrañas que “parecían sacadas de concurso”.
Una foto con un cuchillo en la mano
La orientada explica que, mientras revisaba los currículums, le llamó especialmente la atención uno en concreto: una foto profesional en la que aparecía la persona con un cuchillo de cocina. Con un tono humorístico, Parramón añade a su mensaje un "sí, lo habéis leído bien”.
Esta foto no ha sido la única peculiar que ha recibido, sino que otros postulantes incluyen en su CV fotos de su boda: “¿Quién no incluiría su mejor momento personal en un CV?”, pregunta irónicamente.
Desirée Parramón, orientadora laboral.
Emails que son pura fantasía
Otras de las situaciones que Parramón ha vivido es recepción de correos electrónicos con nombres de usuario que parecen “sacados de videojuego”. Algunos ejemplos que ha puesto son nombres de usuario del estilo “tugatita”, “soyyolamejor” o “cagadapastoret”.
Aunque esos nombres pueden resultar divertidos en un entorno personal, como orientadora laboral, Desiré Parramón le sorprende que la gente los use para buscar empleo.
La orientadora sigue contando que algunos postulantes decidieron ser tan originales que enviaron el curriculum vitae con más de 15 páginas. No solo le asombró la cantidad, sino que además los documentos no llevaban información esencial. Con humor, confiesa que “pidió que se lo encuadernaran".
Currículums coloridos
En un mundo laboral tan competitivo, cada vez más personas intentan encontrar la manera de destacar entre los demás. Algunos optan por especializarse en una área concreta, mientras que otros buscan resaltar visualmente su CV. No obstante, aunque utilizar colores para resaltar ciertos apartados puede ser llamativo para el ojo, es crucial no sobrepasarse.
Désire Parramón ha señalado que se ha encontrado con algunos CV con colores excesivos, desde un “arcoíris de neón” hasta fuentes con letras imposibles de leer. Si bien la intención es buena, en algunos casos puede jugar en contra del postulante, ya que resalta más los errores ortográficos.
Publicación de Desirée Parramón en LinkedIn.
Otras situaciones
Después de compartir esta experiencia, otros orientadores laborales han querido compartir también algunas anécdotas que se han ido encontrando a lo largo de los años.
Un orientador comentó que una vez recibió un CV igual que el suyo, solo que cambiaba la foto de perfil y la profesión: "El apartado sobre mí, calcado, la estructura igual, algunas experiencias también”. Lo que más le dio miedo, es que esta persona curiosamente había asistido a una de sus charlas.
Otra anécdota interesante fue la de un hombre que, antes de comenzar la entrevista, sacó un lápiz para escribir su CV, y al no poder terminarlo, resaltó el orientador laboral, con cierta ironía que no le dio tiempo de dibujar la foto.
Mientras algunos comparten estas situaciones surrealistas, otros han reaccionado positivamente hacia estos actos, viéndolos como actos de creatividad; “Para que después digan algunos que no son personas creativas”, “yo tengo una empresa y me viene un tío cuyo email es 'cagadapastoret' y lo ficho al momento”, han sido algunas de las respuestas.