Eurecat sigue expandiendo su presencia en el mundo del I+D. El centro tecnológico, con sede en Cerdanyola del Vallès, alcanzó el año pasado unos ingresos de 69 millones de euros, un 13% más respecto al año anterior.
“Hemos crecido de forma transversal pero sobre todo en proyectos vinculados con la inteligencia artificial aplicada en el mundo de la industria, la robótica y las iniciativas de economía verde”, apunta Xavier López, director general corporativo y de operaciones de la fundación que controla la actividad.
De acuerdo con sus datos, el 38% de los ingresos proceden de servicios dirigidos al sector privado; el 32%, de proyectos innovadores públicos (la mayoría europeos) y el 30% restante, de la Generalitat. López explica que estas ayudas públicas –valoradas en 20 millones de euros– sirven para financiar proyectos internos de I+D y que “en ningún caso se destinan a cubrir gastos de estructura”.
La fundación rompe vínculos con Leitat por falta de colaboración y por decisión del Govern
En este sentido, López presume de aplicar una “política financiera extremadamente prudente” y defiende que Eurecat no necesita aportaciones de sus patronos para tirar adelante. El año pasado “tuvimos un remanente de 900.000 euros que reinvertimos en su totalidad” mientras que el “endeudamiento se situó en torno a los 10 millones de euros, un volumen bajo respecto a otros agentes del sector del I+D”, asegura.
Este año, Eurecat está buscando financiación extra, unos 8 millones de euros para ampliar una planta de robótica en Cerdanyola y unos laboratorios nuevos de hidrógeno verde en Tarragona. “Estamos en conversaciones con las entidades financieras para conseguir préstamos a largo plazo, aunque idealmente nos gustaría recibir más ayudas de la Administración”, lamenta.
Fuera de Catalunya, la apuesta de crecimiento evoluciona de manera irregular. Eurecat abrió el año pasado un centro en Málaga –que se ha consolidado con cuatro personas– y otro en Madrid, que, en cambio, está en fase embrionaria. Lo mismo en el extranjero. Mientras que en Corea del Sur, los proyectos van viento en popa, en Chile se han paralizado.
De todas formas, Eurecat quiere mantener un crecimiento a doble dígito este año y llegar a los 78 millones de ingresos, incrementando la plantilla de 813 a 900 personas. “Seguiremos apostando por los servicios a empresas y en proyectos públicos”, asegura.
López añade que desde el año pasado Eurecat ha roto sus vínculos con Leitat, un histórico centro tecnológico de Terrassa que ofrece servicios muy similares a los de Eurecat. “El año pasado decidimos cancelar el convenio que nos permitía tener representación recíproca en los órganos de gobierno de cada entidad. El acuerdo estaba vigente desde el 2016 pero no funcionaba, no había colaboración”. López asegura que la Generalitat –cuando estaba en manos de ERC– también influyó en la decisión. Dicho acuerdo establecía que Leitat operaba bajo el paraguas de Eurecat, que tenía la potestad de recibir los fondos de la Generalitat para después distribuirlos a Leitat. El Govern –que tiene presencia en los órganos de gobierno de ambas entidades– decidió que era más operativo asignar los recursos de forma independiente desde el año pasado y finalmente los gobiernos de Leitat y Eurecat optaron por romper el vínculo que les unía.
Lee tambiénLeitat repliega estructura y factura 36 millones de euros en el 2024, un 21% más
