Barcelona abrió el paraguas de la economía azul hace tres años para empujar y coordinar estrategias que posicionaran la ciudad como punto de referencia en un sector muy amplio y disperso que abarca desde la náutica a la actividad portuaria, la energía azul, la sostenibilidad de los océanos, la industria naviera o la formación e innovación relacionada con todos estos campos. Sobre la mesa, la ciudad tiene ahora tres proyectos punteros en marcha y otros en el radar, como acoger la sede de un organismo de la Unesco, el Decenio del Océano.
La apuesta para generar negocio y crear ocupación en un sector que, según los datos municipales, ya representa el 4,3% de negocio respecto al PIB de la ciudad y un 1,4% de la ocupación, ha generado unas sinergias a las que se ha sumado el efecto acelerador de la Copa del América. El evento Tomorrow Blue Economy se ha concebido como escaparate e indicador de futuro. En la Smart City Expo la economía azul ha duplicado espacio, alcanzando los 1.000 m², y contará con catorce empresas emergentes y 22 puertos internacionales con el de Barcelona –pieza clave en el engranaje azul barcelonés– como protagonista y anfitrión.
El sector de la economía azul representa el 14% de la ocupación en la ciudad y el 4,3% del PIB, según el Ayuntamiento de Barcelona
La cita reunirá a más de 250 expertos y analizará las claves para poder desarrollar el potencial económico de mares y océanos desde el punto de vista de la innovación y la sostenibilidad. Impulsado por Fira de Barcelona, colaboran el Ayuntamiento, a través de Barcelona Activa, el Port de Barcelona (con el foro Smart Ports: Piers of the Future) y la entidad World Ocean Council. Esta organización empresarial internacional en el ámbito de la economía marítima sostenible organiza la Sustainable Ocean Sumit y el Global Blue Finance Summit, dos foros que buscan fomentar la colaboración empresarial y desarrollar soluciones financieras innovadoras para facilitar el crecimiento de la economía azul .
Como proyectos ya en marcha, destacan los tres equipamientos que implican todos ellos la colaboración entre distintas instituciones y refuerzan la proyección de Barcelona en este sector económico. Son el Parc de Tecnologia Marítima (de investigación científica con la UPC como socio principal y gestionado por la Fundació Barcelona Capital Nàutica), el BlueTechPort (innovación empresarial liderado por el World Trade Center) y el Barcelona Mar de Ciència, un centro de divulgación abierto a la ciudadanía, impulsado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades a través del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC.
Este nuevo espacio, que está previsto que abra puertas en el 2027, estará ubicado en el dique que entra en el mar entre la torre Mapfre y el hotel Arts, en el Port Olímpic, uno de los espacios donde la ciudad quiere visualizar su apuesta azul. La celebración de la Copa del América sirvió para dar a las obras de transformación de este espacio el tirón final.
“Empezamos a hablar de la economía azul en el 2018 con el Pla Litoral y en octubre del 2021 se aprobó la medida de gobierno, como concepto aspiracional para generar nueva actividad y nueva ocupación”, explica Anna Majó, directora de Innovación Empresarial en Barcelona Activa y responsable de definir e implementar la estrategia de impulso de la economía azul.
Hasta 142 millones de euros suma la inversión prevista en los tres nuevos equipamientos punteros en economía azul
El paraguas cobija desde las más de 5.000 horas de formación hasta el programa de aceleración de empresas de Barcelona Activa (23 participantes) y la transformación del litoral (Port Olímpic o las obras de mejora urbana que se han llevado a cabo para acoger la Copa del América). “Desde el principio se creó la mesa público-privada para impulsar iniciativas y proyectos”, añade Majó.
Fruto de la estrategia azul es el Pavelló Blau, concebido como el equipamiento deportivo al aire libre más grande de la ciudad, una forma de gestionar y articular la estrategia en todo el litoral barcelonés, desde el Port Vell hasta el Port del Fòrum –incluyendo el Port Olímpic– y cuya transformación suma una inversión inicial de 26,7 millones entre 2020 y 2030.
Transformación