Por todos es sabido que este Real Madrid no está para muchas fiestas. Lo ha demostrado en incontables ocasiones esta temporada y volvió a hacerlo en Butarque. Sólo el 3-0 de la ida excusó el tedioso encuentro que ofrecieron los de Santiago Solari en la derrota por la mínima frente al Leganés (1-0).
La imagen del Madrid estuvo de nuevo cerca de la mediocridad. Si no peligró la eliminatoria tras la amplia ventaja que llevaba consigo del Bernabeu fue por la falta de acierto de los atacantes del Lega y de las intervenciones meritorias, una vez más, de Keylor Navas, un portero que siempre responde pese a no comprender todavía cómo perdió el puesto. Fue el único poco habitual que cumplió con nota ante una desgana generalizada.
La imagen del Madrid estuvo de nuevo cerca de la mediocridad
Con la eliminatoria sentenciada en la ida, era una noche propicia para analizar con detalle aquellos jugadores blancos cuestionados durante las últimas semanas. Todos los focos apuntaron a Isco, quien jugó de inicio en otro encuentro intrascendente, como ante el Melilla y el CSKA. Si ya de por sí cuesta encontrar motivaciones en este tipo de duelos, su delicada situación en el Madrid tampoco le empujó a querer demostrar nada a nadie. Terminó sustituido pasada la hora de juego.
Justo de actitud, Isco parece haber hincado definitivamente la rodilla. Desperdició además la ocasión más clara de los blancos en la primera mitad. Se durmió en un contragolpe bien montado en el que el gol era casi una obligación. Tardó en armar el disparo y apareció Juanfran para despertarle con un corte providencial.
Martin Braithwaite vio, esta vez sí, puerta ante el Madrid
Hasta esa acción el Madrid apenas había pisado el área de Cuéllar. Más empeño había puesto el Leganés con acciones que no terminaron en remate por milímetros. Tocaba de pies en el suelo la escuadra de Pellegrino, consciente de que la remontada era una quimera. Poco a poco se animaba Butarque, quien sabe si por la campanada del Girona ante el Atlético a escasos kilómetros o porcombatir la gélida noche. Sabin Merino hizo levantar a la afición pepinera de sus asientos con un cabezazo picado que salió lamiendo el poste.
El Lega no tenía nada que perder, por lo que decidió seguir insistiendo. Contribuyó a ello la inseguridad defensiva que transmitía el Madrid. Ni el doble lateral Reguilón-Marcelo -otro de los señalados- pudo impedir el nacimiento del gol local. Un centro desde la derecha lo mandó a la madera Braithwaite. La jugada se enmarañó y ante la poca contundencia defensiva para despejar el balón, el propio delantero recogió el balón en la jugada de los horrores para empujarlo a la red.
Braithwaite marcó el gol del Leganés, siempre lejos de la remontada
El técnico argentino decidió retocar en el descanso un equipo desdibujado y falto de alma. Vinicius, inédito de punta, regresó a la banda para entrar más en juego y participó algo más en ataque. La entrada de Ceballos dio mayor estabilidad a los blancos, aunque tampoco utilizaron el balón como arma mortífera, sino más bien para frenar las ansias del vecino.
Braithwaite, Merino y Arnaiz estuvieron a punto de encender la llama de la remontada utópica cuando el caos en la retaguardia blanca volvió a reinar. Apareció entonces un siempre atento Navas para negarle la vida al Lega. Brahim maquillar el apagado partido de los suyos y estrenarse como goleador tras una buena jugada de Vinicius, pero el palo y Cuéllar desbarataron la ocasión. Demasiado premio hubiera sido para un rácano Madrid que tentó a la suerte.
Rostro preocupado de Santiago Solari
Ficha técnica
Leganés, 1 - Real Madrid, 0
Leganés: Cuéllar; Juanfran, Bustinza (En-Nesyri, m.70), Omeruo, Siovas, Kravets (Jonathan Silva, m.75); Recio, Gumbau (Arnáiz, m.63), Eraso; Sabin Merino y Braithwaite.
Real Madrid: Keylor Navas; Odriozola, Varane, Nacho, Reguilón (Ceballos, m.46); Casemiro, Valverde; Lucas Vázquez (Brahim, m.85), Isco (Cristo, m.68), Marcelo; y Vinicius.
Goles: 1-0, m.30: Braithwaite.
Árbitro: Hernández Hernández (Comité Las Palmas). Amonestó a Recio (73) por el Leganés; y a Vinicius (82) y Casemiro (90) por el Real Madrid. Expulsó al técnico Mauricio Pellegrino por sus protestas a los 85 minutos.
Incidencias: encuentro de vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, disputado en el estadio de Butarque ante 9.437 espectadores.
Relacionadas
