El Espanyol pide anular todos los descensos
De Primera y de Segunda
El club blanquiazul considera “inasumible” que se “penalice doblemente a los más damnificados”
Dos semanas después de que finalizara la competición liguera, el Espanyol ha emitido un comunicado en el que pide “la eliminación de los descensos” en las “competiciones tutleadas por LaLiga”. Como contrapunto expone el hecho de que la RFEF ya lo hiciera y explica que meses después de la reanudación, parada a causa de la pandemia, “han aparecido circunstancias que han impedido que la liga se haya desarrollado en igualdad de condiciones para todos los participantes.
El Espanyol pone tres ejemplos. El primero: “La última jornada de LaLiga SmartBank no pudo disputarse de manera unificada por la suspensión del Deportivo de La Coruña-CF Fuenlabrada, lo que ha provocado una situación sin una fácil solución porque puede afectar a terceros equipos”. El segundo: “La ausencia de público en los estadios ha sido un gran prejuicio para todos los clubes, pero, en nuestro caso, esa circunstancia ha sido mucho más notable puesto que jugábamos contra cinco rivales directos en la lucha por la permanencia”.
Se sienten perjudicados a nivel deportivo y, doblemente, a nivel económico
Y, el tercero y no por ello menos importante para el club blanquiazul es que se han “esforzado por competir con normalidad, pese a haber confirmado que, en las plantillas profesionales, durante los meses de marzo y abril, ha habido un buen número de jugadores infectados por la COVID-19, con las consiguientes afectaciones que deja la enfermedad durante muchas semanas”. En este punto ponen al Valencia como otro ejemplo de club damnificado.
Los barceloneses consideran que “las situaciones acontecidas son irremediablemente injustas en lo que se refiere al aspecto deportivo, ya que en este final de liga no se ha competido en las mismas condiciones de igualdad que antes de la suspensió” y que “el impacto económico de la COVID-19 se va a extender a la temporada 20-21”. Si el Espanyol decidió retomar la competición, en el pacto de Viana, fue “para salvar, al menos, gran parte de los ingresos de televisión y evitar así una situación extrema, que hubiera provocado la quiebra del sector y la pérdida de muchos puestos de trabajo”.
En este sentido, la entidad añade que a ellos se les debe sumar “el efecto económico que implica un descenso” porque “el castigo acumulado es devastador e injusto para todos los afectados”. De ahí que consideren “inasumible” que “se castigue o penalice doblemente a los más damnificados”.