El Barça se queda sin defensa
Alerta roja
La mala planificación deportiva deja a los azulgranas sin centrales para las próximas jornadas, a la espera de conocer el alcance de la lesión de Piqué
De Jong parece la opción mas clara para acompañar a Lenglet en el eje de la zaga
Piqué sufre un esguince de grado 3 y Sergi Roberto estará fuera dos meses
La derrota del Barcelona ante el Atlético (1-0) no fue la peor noticia de la noche del sábado. Gerard Piqué tuvo que abandonar el terreno de juego, entre lágrimas, tras una aparatosa caída. Sobre el minuto 60 de partido, Ángel Correa cayó sobre la pierna derecha del central azulgrana, forzando un gesto escalofriante de su rodilla que encendió todas las alarmas. La reacción del jugador, completamente abatido, y las imágenes de televisión, que mostraban la gravedad de la caída, no auguraban buenas noticias.
Todo parecía presagiar lo peor, una lesión de cruzados, pero el primer parte médico facilitado por el Barcelona rebajó el desastre y habló de “esguince de rodilla”, que reduce significativamente las semanas de baja. Este domingo, ya de vuelta en la ciudad Condal, se ha sometido a más pruebas para confirmar este diagnóstico y los servicios médicos del club han detallado que sufre un esguince de grado 3 en el ligamento lateral interno y una lesión parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha.
Con su baja segura, aunque a la espera de conocer durante cuantas semanas, el problema para Koeman es saber cómo cubrir esta baja. Y no será una tarea nada sencilla pues los azulgranas no tienen ningún recambio para el eje de la defensa. Piqué ha jugado todos los partidos de esta temporada y solo se perdió un encuentro de Champions, ante el Ferencvaros, por sanción. Ahora mismo el técnico holandés no tiene a nadie para acompañar a Lenglet en el centro de la zaga. Ronald Araujo, su recambio natural, sigue sin tener el alta por su lesión en el bíceps femoral de la pierna derecha y no la recibirá antes de los compromisos de Champions de esta semana, ni de Liga del próximo domingo.
En la enfermería también continúa Umtiti, a punto de recibir el alta, pero en el ostracismo total. Koeman no cuenta con él y no está entre sus planes, por lo que la única opción que le queda al holandés es repetir la fórmula de De Jong. Además, para más complicaciones, solo uno de los centrales del filial está inscrito en la Champions, Óscar Mingueza.
La de Piqué no fue la única baja que sufrió el Barcelona en el Wanda. Sergi Roberto tuvo que retirarse tras notar un tirón en su muslo y las pruebas médicas han confirmado que se trata de una rotura en el recto femoral de su pierna derecha. Una lesión que lo mantendrá alejado de los terrenos de juego al menos dos meses, según ha informado el club. Su recambio natural en el lateral de la defensa azulgrana es el estadounidense Sergiño Dest, pero también es el único que tiene Koeman en esa posición, si no quiere reubicar a otro futbolista para esta demarcación.
Así pues, al Barça le esperan unas semanas muy complicadas sin una defensa de garantías. Una situación alarmante y difícil de entender, aunque no es nueva. La deficiente planificación deportiva, que permitió las salidas de centrales como Jorge Cuenca, traspasado al Villarreal, o de Todibo, está condenando el futuro del equipo. Inmersa en un caos institucional, la directiva del Barça tampoco fue capaz de fichar a Èric García en el mercado de invierno. Bartomeu ya no está, pero su herencia condena al equipo a vivir una de las situaciones deportivas más convulsas de los últimos tiempos. A 9 puntos del liderato y a 6 del Real Madrid, aunque con un partido menos, tendrá difícil luchar por esta Liga.