Luis Enrique, el PSG y la afición parisina tendrán pesadillas con Alisson Becker, el portero brasileño del Liverpool, que les amargó la noche en el Parque de los Príncipes, y con Harvey Elliott, que los mató en el tramo final con un aguijonazo tan inesperado como doloroso. Si el meta internacional salvó a los reds de una amplia goleada que bien habría podido dejar sentenciada la eliminatoria estrella de la Champions, el delantero inglés dejó congelados a los franceses con su gol en el minuto 87 en una contra marca de la casa. Era el segundo remate del Liverpool en todo el partido.
El PSG derrochó fútbol ofensivo, tuvo un aluvión de ocasiones, hasta 28 remates, 9 salvados por Alisson, pero no fue capaz de encontrar el camino del gol. Así que la final anticipada se decidirá en Anfield... con el Liverpool con ventaja mínima.
Acoso francés
El PSG dispuso de hasta tres buenísimas ocasiones con los venenosos Dembélé y Kvaratskhelia, al que le anularon un gol
La eliminatoria estrella de los octavos de final de la Champions medía en el Parque de los Príncipes a dos de los equipos más en forma del continente. El Liverpool llegaba tras acabar líder de la primera fase de grupos con una sola derrota (ante el PSV en la última jornada) -y una sola también en la Premier en 28 partidos-, mientras que el PSG no había perdido ninguno de los 22 últimos partidos, invicto en el 2025.
Aunque una vez en el césped parisino, fueron los de Luis Enrique los que más empujaron en busca de la victoria. En pocas palabras: el PSG se comió al Liverpool en el primer tiempo, con multitud de ocasiones de gol que le podrían haber llevado al descanso con 3 o 4 goles. El mejor, sin duda, un Dembélé en estado de gracia, que hizo lo que quiso.
La ocasión más clara la tuvo Joao Neves en el minuto 16 al enviar a las nubes una asistencia magistral de Dembélé, tras un desborde del Mosquito que dejó atrás a Robertson y MacAllister.
El marcador se pudo mover en el minuto 21 con el gol que anotó el georgiano Kvaratskhelia, la nueva estrella de los franceses, pero su tanto fue anulado por recibir el pase en fuera de juego. El VAR descubrió que fue por el talón de Aquiles.
La siguiente gran ocasión del PSG fue triple, a la media hora. Dembélé desbordó por la izquierda y remató al cuerpo de Alisson, el rechace lo recogió Barcola, que estrelló su tiro en un defensa, y el nuevo rebote lo envió a las nubes.
Antes del descanso, Kvaratskhelia se revolvió en el área y tuvo el 1-0 con un tiro ajustado, que detuvo con una gran intervención el portero brasileño de los reds (m. 37). Alisson estaba salvando a los ingleses.
Segunda parte
El asedio francés se incrementó y Alisson se erigió en la figura salvadora de un Liverpool agobiado, encogido y desconocido
El segundo tiempo arrancó como acabó el primero, con el PSG volcado sobre el área red y con Alisson salvando a su equipo con sus paradas. Kvaratskhelia lo volvió a intentar de falta, ejecutada con precisión buscando el palo largo, pero el portero brasileño voló para enviar a córner (m. 54). Y dos minutos después, el georgiano chutaba desde fuera del área y paraba Alisson.
El asedio del PSG no daba tregua al Liverpool, que no encontraba vías para salir y se veía amenazado por todos los costados. Achraf volvía a amenazar con un tiro que se iba alto (m. 63) y Doué, que había entrado por Barcola, hacía lucirse otra vez al portero Alisson (m. 80).
Cambios providenciales
Arne Slot acertó al dar entrada a Darwin Núñez y Harvey Elliott, que construyeron el 0-1 en una contra vertiginosa
Arne Slot sacudía su banquillo y daba entrada a Curtis Jones y Darwin Núñez por Luis Díaz y Diogo Jota buscando un revulsivo, una contra que sorprendiese a la ordenada defensa de Luis Enrique. Incluso quitó a Salah por Elliott (m. 86)... y le salió de perlas. Entre el delantero uruguayo y el inglés recién incorporado crearon el 0-1, con la colaboración del héroe de la noche, Alisson.
Acababa de parar el portero el enésimo remate de Dembélé (m. 84), resistía el Liverpool descontando los minutos, cuando en el 87 Alisson sacó larguísimo de portería a la cabeza de Darwin Núñez, que bajó el balón y cedió al costado derecho, donde llegaba como una flecha Elliott para marcar el 0-1. Se venía abajo el PSG, incrédulo: el Liverpool había rematado dos veces, una en la segunda parte, y se llevaba media eliminatoria en el bolsillo.
