El Athletic Club se llevó el derbi vasco ante la Real Sociedad con un solitario gol de Sancet (1-0). Los bilbaínos, que se reencontraron con la victoria tras tres empates ligueros seguidos, escalan a la quinta plaza de la Liga, mientras que los de San Sebastián, que venían en buena dinámica tras dos triunfos, se quedan en la zona media.
Un mosaico rojiblanco en un San Mamés de gala, con una gigantesca pancarta en la que se leía Made in Euskal Herria, como reivindicación de la identidad vasca de la cita, protagonizó la previa de un duelo que empezó con una alta intensidad, en especial por parte de los locales, pero sin tino.
El primer chut a portería, repelido por Remiro, no llegó hasta el minuto 16, obra de Djaló, que se estrenaba en el encuentro euscaldún por antonomasia. La ocasión precedió un mayor dominio de los de Valverde, que se avanzaron antes de la media hora con un poderoso cabezazo de Sancet.
Tras la reanudación, tuvo el segundo Beñat Prados. La Real, de la manija de Kubo hasta su sustitución, mejoró y rozó el empate en un remate forzado de Zubimendi. Los de Alguacil controlaron al Athletic en el tramo final, pero Agirrezabala no intervino entre palos y el resultado no se movió.