El mensaje escondido tras el último y polémico vestido de Billy Porter

Billy Porter es de aquellas personas que entienden el poder de la moda y, además, saben cómo y cuándo utilizarlo para conseguir el efecto deseado. Algunas de sus apariciones en las alfombras rojas han sido de las más comentadas; pasando por el traje de gala negro que lució en la gala de los Oscar hasta la más reciente en la gala Met, donde acudió con un look al estilo Cleopatra mientras era llevado por porteadores.

Porter es uno de los principales referentes actuales de la cultura queer y una de las figuras mediáticas que más arriesga en su puesta en escena. Su vestuario es una declaración de intenciones y cultural que va mucho más allá de lo meramente estético y, muchas veces, frívolo.

Siguiendo esta premisa, el artista asistió a la 78 entrega anual de los premios Peabody, en la ciudad de Nueva York, con un estilismo que acaparó todas las miradas. Un vestido vaporoso de tul, de un color a medio camino entre el rosa y el rojo, que contaba con un meticuloso trabajo de bordado.

La firma que está detrás lleva el sello de Celestino Couture y su diseñador, Segio “Celestino” Guadarrama, guardaba un potente mensaje detrás de todos esos metros de tul. No se trata únicamente de un enfoque social sino también ecológico y de cuida del planeta. Y es que el creativo utiliza únicamente materiales reciclados para reducir los residuos.

Toda la producción de Celestino Couture se produce en Estados Unidos y dona el 10% de todas sus ganancias a asociaciones que luchan para acabar con la trata de personas. Con esto, Porter demuestra que es posible vestir con prendas sostenibles que, además de no destruir al planeta,contribuyan a una ayuda humanitaria.