La legislación de Rusia, todavía a día de hoy, establece que las relaciones LGTBI+ son inferiores a la de los heterosexuales. Además, desde 2013 prohíbe la difusión a menores de todo tipo de imágenes o materiales que enseñen ‘relaciones no tradicionales’, una medida que sorprendentemente se aprobó casi por unanimidad en la Duma rusa.
En medio de este contexto político, la cadena de supermercados rusa VkusVill intentó dar un paso hacia adelante mostrando un anuncio sobre una familia real, los Yuma, en una campaña que enseñaba los hábitos de consumo sostenible de sus clientes.
Sin embargo, este intento de mostrar la diversidad de las familias de Rusia que parecía un paso importante para avanzar en los derechos de las familias de la comunidad LGTBI+, acabó en una oleada de críticas no sólo hacia la cadena de supermercados, sino sobre todo para la familia Yuma.
La madre, Yuma Yuma, que es lesbiana y activista por los derechos LGTBI+, ha confesado a través de Telegram que sabía que habrían muchos comentarios desafortunados y de odio, pero no se esperaban la gran magnitud de lo que ha ocurrido.
Las amenazas que ha recibido la familia Yuma han sido tan graves y tan numerosas que han tenido que cerrar sus redes sociales y bloquear sus números de teléfono entre otras medidas de protección para no recibir más amenazas.
Lo peor es que la cadena de supermercados no sólo se ha visto obligada a retirar el anuncio, sino que además ha tenido que pedir perdón por “herir dolorosamente los sentimientos de sus clientes” con esta campaña. Un paso atrás que ha enfadado y entristecido mucho a la familia, que han recibido múltiples críticas y amenazas durante este tiempo.
A pesar de la retirada del anuncio, la empresa sigue recibiendo críticas y amenazas de grupos antiderechos y ultraconservadores. Además de estos colectivos, se han añadido las críticas por parte de los que están enfadados y decepcionados por la retirada del anuncio.