Esta receta tan parecida a una quiche no tiene mucha dificultad, pero sí necesitarás algo de tiempo para completarla. Además, es una idea diferente para incorporar la calabaza a tu menú ahora que está en temporada. La variedad violín es quizás la más común, pero la llamada 'de hornear', grande, carnosa y de color naranja intenso, también te puede venir bien para elaborar este plato que gustará incluso a los comensales más exigentes.
Tarta salada de calabaza
Ingredientes
1 paquete de masa quebrada fresca
400 gr. de calabaza
120 gr de beicon
120 ml de nata líquida
100 gr de queso parmesano rallado
1 cebolla
3 huevos
Hojas de salvia fresca
Sal
Pimienta negra molida
Ingredientes para la tarta salada de calabaza
Elaboración paso a paso:
1. Pela y corta la calabaza en trozos y ásala en el horno a 180 °C durante 40 minutos. Machaca con un tenedor y reserva.
2. Forra un molde de 22 cm con papel de horno y extiende la masa quebrada de manera que cubra la base y los laterales. Retira la masa sobrante. Pincha con un tenedor la base y coloca un trozo de papel para hornear y unas legumbres como peso. Hornéala a 200 °C durante 20 minutos. Reserva.
3. Pela y corta la cebolla bien fina y sofríela hasta que esté dorada. Añade el beicon y cocina hasta que esté crujiente. Retira y reserva.
4. En un bol, bate los huevos y añade el beicon con la cebolla, la nata líquida, la calabaza, el queso rallado y unas hojas de salvia picadas. Corrige de sazón y vierte la mezcla en el molde con la base previamente horneada.
5. Hornea durante 40 minutos a 180 °C comprobando la cocción con un palillo. Deja reposar unos minutos y sirve caliente.