Los 8 alimentos que mejor aguantan en la playa
Materia prima
Se recomienda apostar por opciones que no requieran refrigeración para su conservación
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Es conveniente ser especialmente cuidadosos a la hora de seleccionar los alimentos que nos llevamos a la playa, ya que las altas temperaturas afectan a su estado de conservación y favorecen la proliferación de microorganismos. Esto no significa, sin embargo, que debamos evitar los pícnics playeros, ya que si seguimos una serie de medidas y somos precavidos a la hora de seleccionar, cocinar y conservar los alimentos que vamos a consumir podemos entregarnos al placer de una comida al sol, frente al mar, sin poner en riesgo nuestra salud.
Según la nutricionista del Hospital HM Nou Delfos, en Barcelona, Eva Rodríguez Arisa, es importante seguir una serie de pasos para un pícnic seguro. "En primer lugar, es recomendable tener una neverita con hielos para refrescar y mantener la temperatura de los alimentos, ya que en la playa el incremento del calor y de la humedad es un aliado perfecto para las toxoinfecciones alimentarias", explica la experta, que recomienda también "apostar por alimentos refrescantes y ligeros, de fácil consumo; emplear utillaje para manipulación limpio, que no se comparta para varias manipulaciones y, sobre todo, lavarse bien las manos antes de tocar los alimentos".
Cualquier alimentos cortado, fresco, cocinado, refrigerado o abierto a temperatura ambiente por un tiempo superior a 1-2 h es un producto a desechar
Rodríguez Arisa insta, además, a apostar por alimentos que no requieran refrigeración para su conservación, lo que significa que algunos clásicos de los pícnics son, en realidad, una mala idea si queremos prevenir toxoinfecciones. Es el caso de la tortilla de patata. "Es conveniente evitar tanto la tortilla de patata como todos aquellos alimentos que lleven huevo o leche en su elaboración si no estamos en condiciones de asegurar su correcto mantenimiento en frío", señala la nutricionista.
En este sentido, la experta recomienda desestimar la compra de productos conservados a temperatura ambiente, que lleven leche en su composición, en establecimientos ambulantes: "desde bollería con crema a croquetas, entre otros". Otros alimentos a evitar son aquellos que requieren temperatura para su conservación, desde las recurrentes ensaladas de pasta o arroz a la ensaladilla rusa, además de las carnes poco hechas, los pescados crudos o la fruta cortada. Rodríguez Arisa añade, en este sentido, que "en general, cualquier alimentos cortado, fresco, cocinado, refrigerado o abierto a temperatura ambiente por un tiempo superior a 1-2 h es un producto a desechar".
Por el contrario, existen algunos alimentos que son una buena opción tanto para llevar a la playa como a cualquier lugar donde las temperaturas sean elevadas, siempre que se conserven adecuadamente. Son los siguientes:
Agua
El agua debe ser siempre la bebida de elección, y mucho más si estamos en la playa durante horas y las temperaturas son muy altas. "Es muy importante que en jornadas de calor estemos bien hidratados, cosa que conseguiremos tanto bebiendo agua como escogiendo alimentos que la contengan, desde zumos a gazpachos o licuados", explica la nutricionista, que recomienda preparar en casa aguas saborizadas con trozos de fruta o añadiendo un chorrito de zumo de limón, por ejemplo.
Melón
Nada mejor que optar por un melón pequeñito, siempre con piel y sin cortar, mantenerlo refrigerado en una neverita y abrirlo en el momento con un cuchillo limpio. "En general toda la fruta con piel es una buena opción para un pícnic en la playa, tanto el melón y la sandía como la manzana, el melocotón o las cerezas", señala la experta. El melón es, además, rico en agua, tiene escasas calorías y un cotenido moderado de azúcares. Es también una buena fuente de antioxidantes, como la vitamina C y los betacarotenos.
Gazpacho
En el caso del gazpacho y el salmorejo, Rodríguez Arisa puntualiza: "sin abrir". Así pues, cualquier pasteurizado que esté sin abrir puede ser una gran opción para tomar en la playa, también la leche o los batidos lácteos si los abrimos en el momento.
Latas de conserva
Sardinas, atún, mejillones, berberechos, pulpitos y también encurtidos como los pepinillos son buenas opciones para toma en la playa con seguridad, que además nos aportarán proteínas y otros nutrientes imprescindibles. Es importante fijarnos bien en la composición de las latas que escogemos, ya que la calidad del producto dependerá de los ingredientes con los que ha sido elaborado.
"Es importante escoger latas que contengan únicamente aceite de oliva virgen extra, en la medida de lo posible, y que no presenten sal añadida, o que lleven una cantidad moderada", explica Elisa Blázquez, nutricionista de foodStories, una compañía especializada en servir comida a domicilio con los ingredientes exactos para preparar recetas saludables sin fallar. Para Blázquez, la clave está en evitar, en todos los casos, "aceites refinados, conservantes y azúcar".
Frutos secos
No hay mejor tentempié que un puñado de nueces, almendras o avellanas, fáciles de comer y muy nutritivas. Los frutos secos son ideales para tomar entre comidas, ya que al ser bastante energéticos bastará un puñadito para que nos sintamos saciados, además de que aportan nutrientes que van desde la fibra a las grasas cardiosaludables y las proteínas de origen vegetal.
"Las nueces son las reinas de los ácidos grasos omega 3, mientras que las almendras son ricas en calcio, las avellanas son buenas fuentes de vitamina E y los anacardos cuidan la vista", explica, por su parte, la nutricionista Fátima Branco. Si buscamos una dosis de proteína, nada mejor que escoger las pipas de calabaza y si queremos mantener la línea una buena idea es optar por un puñadito de pistachos, los frutos secos más ligeros.
Verduras enlatadas
Siempre son una buena opción que nos permitirá preparar una ensaladita en un plis plas. Podemos combinarlas con unas legumbres enlatadas también frías y añadir olivas, pimientos o espárragos también en lata. Aunque Blázquez insiste en que "ningún alimento enlatado va a ser mejor que su versión natural, y en la medida de lo posible siempre es mejor preparar los platos en casa, las legumbres pueden ser una buena opción siempre que nos fijemos en la lista de ingredientes y comprobemos que estén simplemente cocidas en agua, que no contienen aditivos". Para aderezarlas, Rodríguez Arisa recomienda siempre optar por salsas pasteurizadas sin abrir, como la mayonesa o la salsa rosa, que bajo ningún concepto deben ser caseras
Fruta enlatada
La playa es un buen lugar para echar mano de alimentos de uso esporádico como la piña y el melocotón en almíbar. Es importante tener en cuenta que las frutas en almíbar deben tomarse con moderación y de forma puntual, ya que contienen gran cantidad de azúcares, de manera que siempre es recomendable optar por la fruta al natural como postre de elección.
Bocadillos de embutido
La solución fácil, recurrente y segura es siempre el clásico bocadillo de jamón, fuet o cualquier otro embutido curado, aunque Rodríguez Arisa recomienda también opciones más saludables: aguacate, tomate y atún, por ejemplo, que siempre podemos acompañar de unos palitos de zanahoria para acabar de redondear el pícnic. No hay que olvidar que los embutidos y carnes procesadas han sido clasificados por la Organización Mundial de la Salud como "probablemente cancerígenos", de manera que se desaconseja su consumo.