El paisaje de Catalunya en una botella de licor
Materia prima
La nueva firma Artesana de Licors lanza una colección de ratafía, aguardiente y licor de abeto
¿Se podría plasmar el paisaje de Catalunya a través de licores artesanales puros y naturales hechos a base de hierbas de los prados y los márgenes? Lito Baldovinos y Enric Rebordosa, los socios del Grup Confiteria, cuyas coctelerías barcelonesas coleccionan premios internacionales, tenían claro que sí y lo han afrontado como un reto: “Es la hora de acabar con los limoncellos y los orujos que han monopolizado la oferta de la sobremesa”.
Con esta premisa acaban de sacar al mercado la nueva firma Artesana de Licors junto a Joan Carbó, el maestro licorero que en su día inició el proyecto de licores y destilados naturales con el equipo de El Celler de Can Roca.
Entre los objetivos compartidos por el tándem de La Confiteria y Carbó, propietario de Master Blends, la destilería situada a mayor altura del mundo, en La Paz (Bolivia), figuran la renuncia a añadir colorantes, aromas, estabilizantes ni aditivos o no enmascarar los sabores con azúcares.
Lo que quieren, aseguran, es capturar el paisaje en una botella elaborando licores de proximidad y de añada (porque recolectan en función de la climatología) con los que ellos mismos logran emocionarse. Para ello eligen los bosques, los prados o los márgenes en los que recolectan las hierbas con las que prepararán todos los productos de la colección: de momento, la ratafía, el Licor d’Avet y un aguardiente al que han puesto el nombre de Rajolí.
Quieren capturar el paisaje en una botella elaborando licores de proximidad y de añada
De momento se pueden encontrar en reconocidos restaurantes como los barceloneses Disfrutar, Gresca o La Barra de Carles Abellán o en los vascos Mugaritz (Rentería) o Gambara (San Sebastián), así como en las coctelerías barcelonesas Paradiso y Dr. Stravinsky. También los venden en Vila Viniteca, Celler de Gelida y Escolà.