Los clientes suelen ser exigentes, pero algunas veces sus pretensiones van más allá de lo aceptable, sobre todo cuando se trata de el horario de atención o del servicio que prestan los camareros del establecimiento. Y, aunque no lleven razón, terminan poniendo una reseña mala en internet, comprometiendo así la reputación del bar.
Ese es el último caso denunciado por Soy Camarero, un usuario de redes sociales gestionado por Jesús Soriano, que se encargar de publicar las situaciones indignas que aún se viven en el sector hostelero.
El problema del cliente era el horario del local. A su juicio, no eran serios y “no se ajustaba a lo que ponía en internet”. “Cierra el día que le da la gana. Salgo del trabajo con el tiempo justo para llegar, y sin previo aviso, está cerrado. Me ha pasado ya en varias ocasiones”, asegura.
Y remacha: “Me parece demasiado informal, ya que muchos dependemos de un horario y ,por desplazarnos hasta su restaurante y que esté cerrado, nos vemos obligados a volver sin desayunar”.
Reacciones
“Qué casualidad”
Ante la crítica, los responsables del establecimiento no se han quedado callados, conscientes de que le puede generar una mala reputación de manera injusta, a su parecer. “Nos encanta que nuestro desayuno te parezcan geniales, pero lo que no nos encanta tanto es que nos taches de informales por acudir a un evento escolar de nuestros hijos, habiéndolo avisado varios días antes”, señalan.
Además, piden que aclaren a “qué otros días se refiere”, porque solo cierran festivos y fines de semana, como ponen en su horario, al que pueden acceder todos los clientes.
Por último, le anima a consumir en otro local en esas ocasiones: “Sentimos que te fueras sin desayunar a tu puesto de trabajo ese día, pero en nuestra zona a escasos metros de nuestros local hay más de siete negocios compañeros que sirven desayunos y muy buenos y en el mismo horario que los nuestros”.