Consejos culinarios para quienes hayan perdido el olfato o el gusto
Covid-19
La fundación Alìcia nos da algunas recomendaciones en caso de sufrir alteraciones en alguno de estos sentidos
Así debe ser tu despensa según la fundación Alícia
Qué comer si sufres una distorsión del gusto a causa del Covid-19
Según la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (Seorl-CCC), en los últimos días, son muchos los pacientes afectados por la CoVid-19 que manifiestan alteraciones del olfato y del gusto (anosmia, hiposmia, ageusia o disgeusia). Por otro lado, el Ministerio de Sanidad, en su informe técnico, muestra la hipogeusia (disminución del sentido del gusto) y la hiposmia (disminución del sentido del olfato) entre los síntomas registrados en estudios preliminares del CoVid-19 en China.
Aunque todavía no hay evidencias científicas sólidas que expliquen sus causas, la Seorl-CCC insta a contemplar estos trastornos como síntomas de la enfermedad y a tomar las medidas de aislamiento, así como la realización del test diagnóstico, para evitar la propagación del virus por pacientes con poca sintomatología.
El Ministerio de Sanidad, muestra la hipogeusia y la hisposmia entre los sintomas registrados en estudios prelominares de la Covid-19 en China
Pero estos síntomas también son frecuentes en otras infecciones respiratorias víricas, en patologías como el cáncer de cabeza y cuello o en personas de edad avanzada. Son cambios que llevan a un menor disfrute de las comidas, pudiendo limitar el seguimiento de una alimentación equilibrada y suficiente. A continuación, os traemos algunas recomendaciones a nivel culinario en caso de presentar pérdida parcial o total del olfato y/o del gusto. Para los casos de distorsión del gusto (disgeusia), no os preocupéis, mañana dedicaremos un artículo específico a ello.
En caso de hiposmia y/o hipogeusia (pérdida parcial del olfato y/o del gusto):
- Aumentar la condimentación de los alimentos con especias y/o hierbas aromáticas (menta, albahaca, orégano, romero, tomillo, laurel, hinojo), ajo, zumos y pieles de cítricos, sal (con cuidado de no echar medio salero y siempre que no esta esté específicamente contraindicada) o potenciadores del sabor (cubos de caldo).
- Elegir sabores fuertes, como el queso curado o el jamón, y mezclarlos con cremas o verduras para potenciar su sabor.
- Elegir alimentos líquidos o jugosos, ya que se favorece la disolución de los sabores y la entrada de estos en las papilas gustativas.
- Elegir alimentos templados o calientes. Algunos estudios concluyen que aquellos alimentos con sabor dulce, amargo o umami podrían verse potenciados si se consumen en caliente, debido a una mayor reacción de los canales TRPM5 de nuestras papilas gustativas1. Además, si nos basamos simplemente en la termodinámica, en caliente los alimentos aumentan la liberación de compuestos volátiles y eso potencia el componente olfativo del sabor.
- Tener en cuenta la presentación de los platos, la forma, el color y la textura de las elaboraciones. Trabajar los sentidos que no se ven afectados, como el visual, el auditivo y el tacto, será de gran importancia.
En caso pérdida total de olfato y/o de gusto (ageusia y/o anosmia):
- Procurar seguir manteniendo una alimentación saludable y equilibrada, cuidando la presentación, el ambiente, las elaboraciones conocidas donde el recuerdo de su sabor pueda ayudar a imaginarlo… hasta recuperarse por completo de la enfermedad causante de dichos síntomas.
- Estar atentos a las fechas de caducidad y al aspecto visual de los alimentos, ya que al no poder oler ni percibir su sabor no podríamos detectar aquellos aromas y sabores que nos indican que un alimento está en mal estado. Asimismo, estar atentos durante el cocinado de que no se nos queme la comida o dejemos el fuego encendido sin percibirlo.