La revista Science ha seleccionado los nuevos fármacos de la obesidad como “Breakthrough of the Year 2023”, la distinción que designa el avance científico más destacado del año.
La publicación valora que los beneficios de estos fármacos se han extendido más allá de la obesidad, ya que este año se ha demostrado que reducen la mortalidad cardiovascular y la enfermedad renal. También valora que ayudan a combatir el estigma asociado a la obesidad, al mostrar que se debe a causas bioquímicas y no a la falta de voluntad.
Pero Science advierte que estos fármacos suponen un desafío para médicos e investigadores, ya que abren nuevos interrogantes científicos, y también para los sistemas sanitarios, que se enfrentan al reto de favorecer un acceso equitativo a tratamientos costosos.
“Los agonistas de GLP-1 han abierto más preguntas de las que han contestado, una característica de un auténtico avance”, afirma Holden Thorp, editor de Science, en un artículo editorial.
Hay estudios en curso para valorar la eficacia de estos fármacos para el tratamiento de adicciones
En un ensayo clínico con 17.000 participantes presentado en agosto, la semaglutida ha reducido un 20% los infartos, los ictus y las muertes cardiovasculares. Otro ensayo clínico con más de 3.500 participantes ha demostrado que frena la progresión de la enfermedad renal, según informó en octubre la compañía danesa Novo Nordisk.
Con unas ventas de más de mil millones de dólares al mes, Novo Nordisk ha alcanzado este año un valor superior al PIB de toda Dinamarca. La compañía comercializa el fármaco como Wegowy para la obesidad y como Ozempic y Rybelsus para la diabetes.
Un segundo agonista de la hormona GLP-1, la tirzepatida de la compañía Eli Lilly, está ya aprobado en Europa para el tratamiento de la diabetes y se espera que lo esté en los próximos meses para la obesidad. Los resultados de los ensayos clínicos indican que la tirzepatida consigue una pérdida de peso superior a la semaglutida. Otras multinacionales farmacéuticas como Pfizer o AstraZeneca están desarrollando sus propios agonistas de GLP-1.
Una de las preguntas que se han abierto con la llegada de esta nueva familia de fármacos es la de qué indicaciones tendrán más allá del tratamiento de la diabetes y la obesidad. Tras los resultados presentados este año, se valorará su potencial para enfermedades cardiovasculares y renales. También hay ensayos clínicos en curso para el tratamiento de adicciones después de que algunos de sus usuarios hayan informado que reduce su necesidad de consumir tabaco o alcohol, lo que se atribuye a que los fármacos bloquean receptores en el cerebro relacionados con la búsqueda de gratificaciones. Otros ensayos clínicos están explorando su posible eficacia para el tratamiento del alzheimer y del parkinson, que se explicaría por su efecto antiinflamatorio en el cerebro.
'Science' valora que los fármacos ayudan a combatir el estigma asociado a la obesidad
En el campo de la obesidad, las preguntas que esperan respuesta son si el tratamiento debe ser para toda la vida; cuáles pueden ser los efectos secundarios del tratamiento a largo plazo; y cómo evitar que se vuelva a ganar peso si se interrumpe el tratamiento, algo que ninguna compañía farmacéutica ha mostrado interés en investigar.
Pero la gran pregunta a corto plazo es cómo facilitar que estos tratamientos lleguen a todas las personas para las que estarán indicados. Con un coste por persona de más de mil dólares al mes en Estados Unidos para la semaglutida, y unos 310 euros mensuales en Alemania, y a la espera de que se fije el precio en España, será difícil que los sistemas sanitarios puedan cubrir el coste del tratamiento para toda la población obesa, lo que obligará a priorizar a los colectivos que más puedan beneficiarse de él.
“Estos fármacos están forzando importantes discusiones sobre cómo consideramos la obesidad”, destaca Holden Thorp, el editor de Science. “Ahora hay pruebas convincentes de que una diferencia bioquímica, no la poca fuerza de voluntad, es responsable del aumento de peso. Esto podría reducir el estigma y los juicios sobre el peso. Y esto realmente sería un gran avance”.