“Los niños están expuestos a muchos más alergenos por culpa de los ultraprocesados”

Aumento de casos

 La pediatra especialista en alergia infantil Mercedes Escarrer avisa que las alergias alimentarias en niños van en aumento y que hay que saber tratarlas

Mercedes Escarré

Mercedes Escarré, pediatra especialista en alergia infantil 

Anna Belil / Diseño LVD

Las alergias alimentarias en niños van en aumento y son varios los factores responsables de ello, según Mercedes Escarrer, pediatra especialista en alergia infantil y coordinadora autonómica del programa alerta escolar balear. Ella destaca la importancia de que los comedores escolares y también los colegios estén formados y preparados para gestionar las alergias a los alimentos de los niños y avisa que algunas de ellas pueden provocar la muerte.

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¿Hay datos de qué porcentaje de la población infantil tiene una alergia alimentaria?

Más o menos uno de cada 10 niños en edad escolar puede presentar alguna alergia alimentaria, según el segundo observatorio mediterráneo del comedor escolar. Es importante diferenciar entre alergia e intolerancia. Porque a veces se confunde. La alergia está mediada por el sistema inmunológico y es la que tiene riesgo de que el niño tenga una reacción alérgica grave, lo que llamamos anafilaxia. En cambio, la intolerancia no está mediada por el sistema inmunológico. Normalmente, suele ser por un déficit de alguna enzima. Por ejemplo, se tiene la intolerancia a la lactosa (el azúcar de la leche), por un déficit de la lactosa, pero esto nunca puede producir una reacción alérgica grave. Una intolerancia nos puede dar un cuadro de vómitos, diarrea, pero nunca nos puede producir la muerte. En cambio, una alergia, sí.

Si en lugar de hacer una tortilla con patatas y huevos, la compras para que te dure un mes en la nevera, lleva aditivos, lecitina de soja, gluten...

Mercedes EscarrerPediatra

¿Han aumentado los casos de niños con alergias?

Sí. De todo tipo.

¿A qué se debe?

Responde a diferentes causas. Una es lo que se llama la teoría de la higiene. Cada vez en las casas se tiende a estar todo más hermético y vivimos menos en el campo. Y el sistema inmunológico en lugar de estar preocupado en solucionar temas de parásitos por estar en contacto con la naturaleza, se decanta hacia la alergia. La Inmonuglobulina E, puede ir a tratar los parásitos o las alergias y la teoría de la higiene hace que el sistema inmunológico se decante más hacia la alergia.

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¿Más causas?

Cada vez se toman alimentos más procesados y ultraprocesados. Si en lugar de hacer una tortilla con patatas y huevos, la compras para que te dure un mes en la nevera, lleva aditivos, lecitina de soja, gluten… una serie de alergenos que en circunstancias normales, si preparas la tortilla en casa no los tendrías. Los niños están expuestos a muchos más alergenos por culpa de los ultraprocesados. Están expuestos de una forma más precoz y con más cantidad a unos alergenos que a lo mejor no tendrían por qué estar expuestos si se comiese comida casera. Es el problema de los aditivos.

Las alergias se diagnostican más, pero también ocurre que las modificaciones genéticas que se hacen del trigo potencian más su poder alergénico

Mercedes EscarrerPediatra

¿Hay alergias alimentarias o intolerancias que sean más comunes, más prevalentes?

En los niños más pequeñitos lo más frecuente es la leche y el huevo. La ventaja de estas alergias a la leche y el huevo es que normalmente en un 75% de los casos a los dos años, acaban siendo tolerantes. Pierden la alergia. Por suerte, porque la leche y el huevo se encuentran en muchos alimentos. En los niños más mayores, tenemos sobre todo la alergia al pescado, a los frutos secos y también algunas frutas, como por ejemplo el melocotón. Y también al marisco. Muchas de estas alergias de los niños más mayores son persistentes, se mantienen con el tiempo.

¿Qué alergias son las que puede producir un cuadro de más gravedad?

Los frutos secos son de los que más asocian con gravedad, igual que a veces el marisco, el pescado. El riesgo depende. Hay niños que cualquier alimento que tenga proteína puede producir una reacción alérgica.

La población celiaca también aumenta ¿Se diagnostica más?

Sí porque los pediatras estamos más pendientes. Pero también pasa que las modificaciones genéticas que se hacen del trigo potencian más su poder irritante y alergénico.

Los comedores escolares cada vez gestionan más estas alergias ¿Qué deben tener en cuenta?

La contaminación cruzada. Cuando tenemos un niño alérgico hay varios pasos. Primero, la familia tiene que informar al centro educativo de la alergia que tiene su hijo y explicarle al niño lo que no puede comer, pero también lo que sí. Es muy importante que el niño esté bien identificado y llevar al colegio un plan de actuación en el caso de que ese niño ingerirse un alimento al que es alérgico.

Conforme avanza la edad, es más frecuente la alergia al cacahuete, los frutos secos, los mariscos, y las frutas.

Conforme avanza la edad, es más frecuente la alergia al cacahuete, los frutos secos, los mariscos, y las frutas.

Getty Images/iStockphoto

¿Qué contempla el plan de actuación?

Hay que tener bien estipulado qué tiene que tomar el niño si ingiere el alimento. Y tener disponible y saber cómo poner una inyección de adrenalina. El colegio también debe tener en cuenta cosas. Si el comedor es con servicio de catering, este tiene que estar informado y la bandeja de este niño tiene que estar totalmente separada con su nombre y precintada para que no se pueda contaminar. Si la comida se hace en el comedor del colegio, todo el personal debe saber que hay un niño alérgico. Porque si por ejemplo tienen un alérgico al huevo, si en una plancha se están haciendo huevos fritos y se hace una pechuga de pollo para el niño alérgico, las proteínas del huevo, por contaminación cruzada, pasan al pollo. Así que hay que limpiar muy bien las planchas y preparar la comida del niño alérgico la primera. Igual ocurre con los microondas, se tienen que limpiar bien o tener dos microondas por si acaso hay un niño alérgico. O a la hora de cortar el pan, si tenemos un niño celiaco, es importante que el cuchillo no corte un pan con gluten y luego uno sin gluten, porque en los dientes del cuchillo se puede pasar el gluten. Eso es muy importante.

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Qué otras cosas se deben tener en cuenta.

Si ya sabemos que hay niños alérgicos a los frutos secos, lo ideal es que sea un colegio libre de frutos secos. Porque el fruto seco no es imprescindible para cocinar y sí que puede dar reacciones graves. Y la comida de un niño alérgico tiene que estar en una bandeja y totalmente identificada, poniendo el nombre y la alergia. Pero estos niños no se tienen que discriminar en una mesa aparte, no lo tenemos que señalar por ser alérgico. Es cierto que mientras esté comiendo, especialmente si es pequeño, necesita una supervisión. Necesita que el compañero del lado sepa que ese niño tiene alergia y que no le puede ofrecer su comida. O si en una mesa hay un alérgico a la leche y los del lado han tomado yogur, es muy importante que después una persona les limpie las manos y la cara para que esos niños luego no puedan tocar al niño alérgico. Hay que formar también al personal de comedor. Y no nos debemos de olvidar de los patios ni de las meriendas. Lo ideal es que merienden siempre con la supervisión de un adulto y decirles que no pueden comer nada de sus amiguitos.

¿Esto se aplica en los colegios?

Lo ideal es que todos los colegios lo hagan, porque una equivocación puede producir la muerte de un paciente. Aquí en Baleares había una niña alérgica a las proteínas de la leche de vaca y se le dio un sándwich con un producto que ponía: No contiene lactosa. Esto es el error que se comete muchas veces. La lactosa es el azúcar de la leche pero no produce alergia. Si un alimento especifíca no contiene lactosa, tiene proteínas de la leche de vaca y si lo toma un niño alérgico a las proteínas de leche de vaca para él puede ser mortal, porque le puede producir anafilaxia. Por eso es muy importante también el etiquetado. Y nunca hay que forzar a un niño alérgico, si no quiere comer algo, que no lo coma. Porque a veces el cuerpo es sabio y rechaza las cosas que pueden tener alergia.

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