Las legumbres constituyen uno de los pilares indispensables de la dieta mediterránea. Contribuyen a mantener un estilo de vida saludable al contener los nutrientes esenciales que nuestro organismo necesita para su correcto funcionamiento. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) aconseja una ingesta de, mínimo, cuatro raciones de legumbres a la semana ya que son la principal fuente de proteínas de origen vegetal. Su consumo es recomendado para todos sin importar la edad, aunque es especialmente importante la ingesta de legumbres en los mayores, en especial, en aquellas personas que puedan tener algún riesgo de enfermedad cardiovascular.
Por qué consumir legumbres
Las legumbres como los garbanzos, las alubias o las lentejas son fuentes de multitud de vitaminas, proteínas y minerales. Son alimentos con bajo nivel glucémico, bajo aporte calórico pero alto nivel proteico. Estas características les otorgan la capacidad de ayudar a un correcto funcionamiento del sistema nervioso y a regular procesos de nuestro organismo. Las legumbres son “ampliamente recomendadas para aquellos mayores que tengan riesgo cardiovascular, diabetes, sedentarismo u obesidad” aseguran desde la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología.
Beneficios de las legumbres en los mayores
Controla el colesterol
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Las legumbres constituyen un grupo de alimentos con un alto contenido en proteínas de origen vegetal. Tal y como afirma la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), las legumbres contienen el “doble de proteínas que el trigo y el triple que el arroz”. Su valor nutricional proteico es sumamente algo ayudando a regular los niveles de energía o controlando el colesterol.
Sensación de saciedad
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Contienen un alto contenido en hierro, zinc, magnesio, potasio y carbohidratos complejos que se digieren lentamente y otorgan una sensación de saciedad que evitará el picoteo entre horas. Las personas mayores con problemas de movilidad o sedentarias, verán aumentado su gasto calórico con el consumo de legumbres al “favorecer la creación de energía constante” sentencian desde la FAO.
Poseen un bajo contenido en ácidos grasos y grasas pero un alto contenido en fibra. Al igual que el punto anterior, este hecho ayuda a que personas que se encuentren a dieta o con poca movilidad puedan consumirlas sin miedo a aumentar de peso.
Previene enfermedades cardiovasculares
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Las enfermedades cardiovasculares, más propensas en personas mayores, se previenen con la ingesta de legumbres. El efecto saciante, su alto contenido en proteínas y las escasas grasas ayuda a mantener el peso de manera saludable de quién lo consume y a luchar contra la obesidad.