Uno de los principales contaminantes del mar sale de nuestra lavadora
Ecología
Más de 700.000 micropartículas de plástico se desprenden en cada lavado, no llegan a eliminarse en las plantas depuradoras y viajan por los ríos hasta el mar
Este verano la ONG Greenpeace lanzó la campaña “Mejor sin plásticos” para pedir medidas para eliminar los microplásticos del mar y a principios de mes salió la noticia sobre el veto a los cosméticos con microplásticos en Reino Unido. No es de extrañar que estas partículas diminutas preocupen tanto, y es que cada segundo más de 200 kilos de plástico es vertidos en los mares y océanos del mundo, más de 8 millones de toneladas al año, según el informe “Plásticos en el pescado y el marisco”, presentado por Greenpeace. En este informe también se estima que en los mares y océanos existen entre 5 y 50 billones de microplásticos, algunos de estos residuos pueden degradarse y desaparecer en apenas seis meses, pero otros tardarán varios cientos de años.
Cada segundo más de 200 kilos de plástico es vertidos en los mares y océanos del mundo, más de 8 millones de toneladas al año”
Ahora un estudio realizado por la Universidad de Plymouth (Reino Unido) nos demuestra que uno de los grandes focos de contaminación lo tenemos en casa y los usamos a diario. Los investigadores observaron que cada ciclo de lavado de una lavadora puede liberar más de 700.000 fibras de plásticos microscópicos al medio ambiente.
El equipo de Plymouth analizó durante 12 meses que pasaba al lavar ropa de materiales sintéticos a diferentes temperaturas en lavadoras domésticas, y utilizando diferentes detergentes para cuantificar las microfibras que se desprenden.
El estudio refleja que el tejido acrílico es el que más contamina porque desprende cerca de 730.000 partículas en cada lavado, cinco veces más que los tejidos de mezcla de algodón y poliéster (137.951) y 1,5 veces más que los tejidos 100% poliéster.
El tejido acrílico es el que más contamina porque desprende cerca de 730.000 partículas en cada lavado”
La investigación, publicada en Marine Pollution Bulletin, fue dirigido por el estudiante de doctorado Imogen Napper en conjunto con el profesor Richard Thompson, que es un experto internacional en microplásticos y desechos marinos después de haber trabajado en este ámbito durante más de 20 años.
”Se espera que la cantidad de microplásticos en el medio ambiente aumentará en las próximas décadas, y hay preocupación por la posibilidad de que tenga efectos nocivos si se ingieren. Pero mientras que la liberación de fibras diminutas como consecuencia del lavado de los textiles ha sido ampliamente sugerida como una fuente potencial, ha habido poca investigación cuantitativa sobre su importancia relevante, o sobre los factores que pueden influir en dichos vertidos”, explica Richard Thompson.
La cadena tóxica de los microplásticos
Greenpeace ha analizado el impacto que los microplásticos -piezas de hasta 5 milímetros de longitud- tienen sobre los ecosistemas marinos y asegura que se ha documentado los efectos que las piezas de plástico tienen sobre peces y crustáceos y cómo, su ingesta implica alteraciones en la reproducción de las especies y en su comportamiento.
Los microplásticos se generan de la degradación de plásticos mayores, de los ya existentes en cosméticos, y ahora también sabemos que puede desprenderse de tejidos sintéticos en la lavadora.
“Los daños de los microplásticos, a diferencia de los más grandes, son potencialmente mayores porque son más accesibles a más especies, incluso para el fitoplancton”, ha asegurado la responsable de océanos de Greenpeace, Elvira Jiménez. De este modo, ha explicado que los peces más pequeños confunden estos materiales con huevas y los ingieren. Después, los microplásticos no se expulsan, sino que permanecen en el interior del pez. Finalmente, estos microplásticos acaban volviendo a nuestras casas en forma de comida dentro del pescado. En cuanto al impacto en la salud humana, Jiménez pide que se investigue porque son portadores de toxinas.