4 de julio: el Día de la Independencia
Celebraciones de verano
Todo Estados Unidos se vuelca en la celebración del 4 de julio, fecha que celebra la Declaración de Independencia del Reino Unido
El Congreso de Estados Unidos firmó la Declaración de Independencia el 4 de julio de 1776, fecha que se celebra cada año como la fiesta nacional del país
Este miércoles 4 de julio se celebra una de las fiestas nacionales más conocidas en todo el planeta: el Día de la Independencia de Estados Unidos.
Es un día celebrado en los cincuenta estados que componen el país. De Nueva York y Washington en la costa Este, a las ciudades de California en la costa Oeste; desde los estados montañosos que hacen frontera con Canadá en el norte, a la frontera de Texas con México en el sur.
Más de 325 millones de personas lucen la bandera con barras y estrellas, preparan comidas al aire libre, lanzan fuegos artificiales y aprovechan el inicio del verano para celebrar una fiesta.
Este día, todo se tiñe de color rojo, blanco y azul: los colores de la bandera americana.
La colonia se convierte en un nuevo país
Como la mayoría de fiestas nacionales, la celebración del 4 de julio está relacionada con el nacimiento de Estados Unidos como país.
Siguiendo la estela de Colón y los primeros colonizadores españoles en América, en el siglo XVI otros países europeos cruzaron el océano Atlántico y establecieron sus colonias en el continente norteamericano: franceses, holandeses e ingleses.
Los primeros asentamientos ingleses se crearon durante la primera mitad del siglo XVII en la costa este. El gobierno de Inglaterra envió en barco a los primeros peregrinos, se hizo con el control de los territorios y los declaró propiedad del Imperio Británico.
A medida que pasaba el tiempo, crecieron las diferencias entre ingleses y americanos. Se suponía que los nuevos territorios formaban parte del Imperio, pero los americanos no tenían representación en el Parlamento británico. En el nuevo continente, la religión católica ganaba terreno al protestantismo de la Iglesia de Inglaterra.
Además, controlar un territorio tan grande desde la distancia resultaba muy difícil. El continente americano se encontraba a semanas de viaje en barco, cuando todavía no existían las telecomunicaciones.
Así pues, entre 1760 y 1770 tuvo lugar la Guerra de Independencia, en la que los estadounidenses luchaban para independizarse del Reino Unido. El Congreso de Estados Unidos aprobó la Declaración de Independencia el 4 de julio de 1776.
Música y fuegos artificiales
El 4 de julio es un día festivo, así que la mayoría de edificios y servicios públicos están cerrados. El curso escolar ya ha terminado y las tiendas y negocios cierran para celebrar la fecha.
El motivo de esta festividad está muy presente en las celebraciones: ropa, comida, complementos, decoraciones, edificios, vehículos e incluso mascotas… cualquier cosa sirve para exhibir la bandera americana como símbolo de patriotismo.
Aprovechando que es verano, muchas personas preparan picnics o barbacoas al aire libre. Los familiares que viven en ciudades distintas del país viajan a casa para reunirse y celebrar este día juntos.
Muchos ayuntamientos organizan desfiles y fuegos artificiales que suelen ir acompañados de conciertos, incluyendo la representación del himno nacional.
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