La consellera de Educació y FP, Esther Niubó, está tratando de mantener el equilibrio en la polémica del bachillerato. Por un lado, quiere cumplir con la homologación del currículum de bachillerato de la ley de educación (Lomloe) y, por otra, quiere consensuar la fórmula con el sector educativo que ha protestado por la reducción de horas de materias científicas que supone, añadidas a las de los últimos años, y la pérdida de las literaturas catalana y castellana como materias de modalidad.
Niubó reitera que los requerimientos, como el enviado por el Ministerio de Educación y FP, hay que cumplirlos por lo que se aplicará la fusión de física y química y biología y geología en 1º de bachillerato, que actualmente se dan por separado. Eso quiere decir que tampoco batallará, como pide Junts, una posible modificación del real decreto del Gobierno, ya aprobado en 2022 y sobre el que la Generalitat no presentó alegaciones en su día.
Educació reduce la carga horaria de las optativas para cederla a las materias de modalidad
Pero, al tiempo que cumple, propone consensuar la fórmula con los directores, docentes y sociedades científicas que, desde que conocieron la noticia expuesta “por error” en el portal de Educación en diciembre, han puesto el grito en el cielo por la reducción de horas en las ciencias, en una acumulación de pérdidas desde hace diez años que han desvirtuado el modelo de currículum propio de Catalunya, que apostó por el conocimiento científico. La Lomloe plantea ceder horas de materias de modalidad a favor de materias optativas para permitir al estudiante conocer otros ámbitos de conocimiento.
Niubó se reunió ayer, jueves, con directores y sociedades científicas y propuso aumentar una hora más las materias de modalidad, incluida matemáticas, reduciendo las horas destinadas a optativas. Con este planteamiento, el alumno hará 4 horas más de ciencias respecto al curso actual (1 de matemáticas y 3 de modalidad), perdiendo esas horas de optativas.
En el horario que se había colgado en el portal del departamento por error se definían 3 horas para la fusión de física y química o biología y geología. Ahora serán 4 horas. Esto supone todavía una reducción respecto al curso actual pues las dos materias de modalidad suman 6 actualmente. La novedad es que se complementa el horario con una materia más en línea con estas asignaturas de 4 horas. Se le ha dado el nombre de “contextos de biología, geología y ciencias ambientales” o bien “contexto de física y química”.
Esta fórmula, que vuelve a las franjas de 4 horas por materia como antes de 2022, gustó más a las direcciones reunidas ayer que confían que se acabe de detallar el resto.
Para Niubó, ésta es una propuesta “muy bien acogida” en línea con lo que pedían los docentes. "Lo que estamos proponiendo es incrementar las horas en las materias de modalidad en los bachilleratos, no sólo en ciencias, sino también en el resto de itinerarios que ganen una hora en cada una de ellas”.
Por lo que respecta a las literaturas catalanas y castellanas, Niubó ha remarcado que “lo que queremos es adecuar el currículum a la normativa para garantizar los derechos del alumnado. Pero queremos hacerlo manteniendo la singularidad cultural y lingüística de Catalunya y por eso decimos que debemos poder mantener la literatura catalana y castellana como modalidad en segundo de bachillerato, y esto será así”.
Los cambios están previstos para el curso 2026-2027.
Educació emplazó a los asistentes a las reuniones a futuras reuniones.
Educació explica que la homologación es necesaria para garantizar los traslados de expedientes de alumnos de 1º de bachillerato a 2º en otra comunidad autónoma. Tal y como se da el currículum actual, los alumnos de bachillerato científico-tecnológico pueden elegir 2 entre las 4 materias científicas. Si se mantuviera este currículum darían más tiempo en dos materias, pero no darían la parte correspondiente de la materia fusionada en el resto de España.
Esta homologación de materias se produce en el contexto de una creciente presión del Partido Popular por diseñar para las autonomías en las que gobierna una selectividad única. El PP defiende que la prueba de acceso a la universidad debería ser única en todo el territorio ya que aplica para cualquier campus, independientemente de su situación geográfica. El diseño de la prueba corresponde a cada gobierno autonómico en función del currículum que aplica.
El Gobierno responde que la calificación de estos exámenes tiene un peso del 40% de la nota de acceso, ya que el 60% restante corresponde a la nota de bachillerato que pone cada centro, lo que es imposible de homologar.
Pero el PP está determinado a dar esta batalla. También ayer, la vicesecretaria de Educación del PP, Ester Muñoz, se reunió con secretarios generales, viceconsejeros y directores generales de Educación de las comunidades gobernadas por los populares para iniciar los trabajos de preparación del “proyecto de EBAU común de 2026” para negociar cómo abordar los contenidos y los modelos de examen.
El Gobierno lo único que ha homologado es que la prueba de acceso se celebre los mismos días en toda España (3, 4 y 5 de junio), salvo en Catalunya (11, 12 y 13 de junio), y que haya igualdad de criterios en la corrección de faltas de ortografía.