El Departament de Salut pondrá en marcha a partir del próximo año las primeras 25 medidas para preservar, reformar y modernizar el sistema público de sanidad, entre las que figura la mejora de la organización de los centros de atención primaria o la retribución a los profesionales por los resultados de su trabajo en función, entre otros parámetros, de la valoración de los pacientes.
Renovarse o morir. “Necesitamos hacer una puesta al día de nuestro sistema de salud para que pueda garantizar a las generaciones futuras las prestaciones tan robustas de las que hemos disfrutado nuestra generación”, ha afirmado la consellera de Salut, Olga Pané, en la presentación de las primeras medidas propuestas por el Comité para la Evaluación, Innovación y Reforma Operativa del Sistema de Salut (Cairos).
Centrar la atención en las personas, cuidar a los profesionales de la salud y optimizar el funcionamiento de las instituciones sanitarias son los objetivos de las propuestas de este think tank, formado por profesionales de prestigio y presidido por Manel de Castillo, director general del hospital pediátrico Sant Joan de Déu.
Es el momento de la responsabilidad, no de pensar solo en los intereses de partido o de sindicato"
La sociedad actual poco tiene que ver con la de hace cuatro décadas, cuando se diseñaron las bases del actual sistema de salud. “No existía Internet, ni teléfonos móviles, y solo el 10% de la población tenía más de 65 años, cuando ahora es casi el 20% de la población”, ha resumido la consellera.
Desde el 2019 hasta ahora el presupuesto sanitario anual en Catalunya ha incrementado en 5.000 millones de euros, las plantillas de profesionales han aumentado en un 25%... “Y sin embargo siguen faltando profesionales y las listas de espera no solo se han reducido, sino que han aumentado”, expone Pané para justificar la necesidad de reformas en profundidad que frene el éxodo de la población a los seguros privados (un 32% en Catalunya, hasta un 405 en algunas zonas), que “pone en peligro la sostenibilidad del sistema público que tenemos que defender si queremos que siga siendo un instrumento de cohesión social y redistribución de la riqueza”.
No hay fórmulas mágicas. Los expertos de Cairos han fundamentado sus propuestas en consultas y análisis de hasta 50 informes sobre situación y mejora del sistema redactados en los últimos 30 años. Y ha reaccionado en un tiempo récord, apenas tres meses desde su creación, porque el contexto es delicado.
Según Del Castillo, las medidas persiguen configurar un sistema “más eficiente, más desburocratizado y más adaptado a las necesidades de las personas” mediante actuaciones en tres ámbitos: las necesidades de los usuarios, el cuidado de los profesionales y la organización de los centros.
Olga Pané, consellera de Salut
La mayor parte de las propuestas se condensan en una nueva institución, los CSIR (Centros de Salud Integral de Referencia), una evolución de los actuales centros de asistencia primaria (CAP). A partir del segundo trimestre del 2025, diez CAP de diferentes territorios catalanes que se ofrezcan voluntariamente se transformarán en CSIR para realizar una prueba piloto.
Estos centros incorporarán, además del personal sanitario, efectivos de derechos sociales, de manera que el paciente tendrá un único gestor de sus necesidades sanitarias y sociales. Por otra parte, se pondrán a prueba los nuevos roles profesionales, como los administrativos sanitarios, los sistemas de pago por incentivos, la oportunidad de que los profesionales puedan realizar investigación o innovación o la simplificación de la forma de trabajar de los equipos.
En esta simplificación figura la incorporación de un asistente digital basado en inteligencia artificial que transcribirá e incorporará a la historia clínica las conversaciones entre el paciente y el médico o el enfermero. De esta manera los profesionales sanitarios se aliviarán de tareas burocráticas. El mismo objetivo que persigue la universalización de la figura del administrativo sanitario.
“Es una forma de trabajar con más autonomía, más capacidad de resolución y más integración entre los diferentes niveles (primaria, hospitalaria y servicios sociales), que es lo que necesitan los ciudadanos”, ha resumido Del Castillo.
Cairos ha centrado sus primeras propuestas en la salud pública y la asistencia primaria; seguirán los hospitales y la salud mental
Si en primera instancia las propuestas de Cairos se han centrado en la salud pública y la atención privada, en segunda instancia, en el segundo trimestre del 2025, el comité de expertos se centrará en medidas sobre la atención hospitalaria, intermedia y salud mental.
Del Castillo ha reivindicado la independencia de los expertos y ha reclamado la implicación de todos los estamentos. “Es el momento de la responsabilidad, de pensar en el sistema y no solo en nuestros intereses como partido, como sindicato o como colegio profesional”, ha dicho.
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