El jurado ve homofobia en el crimen de Samuel Luiz, con cuatro culpables y una inocente
Paliza mortal
El jurado declara no culpable a Katy Silva al no considerar probada su participación en la brutal paliza
Ya hay veredicto en el “caso Samuel Luiz”. Se ha conocido pasada la una de la tarde de hoy: 4 culpables y una inocente. El jurado ha deliberado casi una semana, desde las doce del mediodía del pasado lunes, en maratonianas sesiones para dar respuesta las 115 preguntas del objeto del veredicto, redactadas por la magistrada presidenta de este tribunal popular.
Los cuatro veredictos de culpabilidad se han dictado por unanimidad. El jurado considera responsables directos de la muerte de Samuel Luiz a Diego Montaña, Alejandro Freire y Kaio Amaral. Se les imputa un delito de asesinato con alevosía. Se enfrentan, la sentencia que se va a dictar los próximos días, a penas de entre 22 y 27 años.
En el caso de Diego Montaña, el tribunal estima que en su actuación, al grito de “maricón de mierda”, hubo clara homofobia. Y pide que esa conducta se considere como una agravante en la condena que se va a dictar ahora.
A Alejandro Mínguez se le considera, también por unanimidad, autor de un delito de cómplice de asesinato; esta fue ya una posibilidad abierta por la fiscal en su alegato de conclusiones definitivas. La pena para él, por lo tanto, quedará reducida a un máximo de 13 años.
La sorpresa ha saltado, sin embargo, esta mañana al declarar ese mismo jurado “no culpable” a Katy Silva, exnovia de Diego Montaña, a la que la fiscal sí consideraba, como mínimo, autora de un delito de cómplice de asesinato.
Los miembros del jurado llegan a la conclusión de la que la joven no tuvo una participación directa en la brutal paliza que acabó con la vida de Samuel Luiz en A Coruña. La magistrada, presidente del tribunal popular, le ha notificado hoy mismo que iba a dictar sentencia de absolución.
El jurado ha tenido que analizar, una a una, las conductas de los cinco acusados esa noche antes de dictar su veredicto
Probada, por unanimidad, esa conducta xenófoba de Diego Montaña y que fue él quien dio el primer golpe, el jurado ha tenido que desgranar, una por una, la conducta de los otros cuatro acusados en esa brutal paliza.
Alejandro Mínguez
En el caso de Alejandro Mínguez la acusación de cómplice de asesinato se basa en el hecho, considera el jurado, de que el joven tuvo una activa intervención al intentar “eliminar las posibilidades de defensa de Samuel".
Kaio Amaral
Ese tribunal no tiene dudas, por otra parte, de la activa participación en la agresión grupal de Kaio Amaral. Él aseguró en el juicio que no le puso la mano encima a Samuel; el jurado considera probado, sin embargo, que participó activamente en la persecución, que se preocupó de que nadie pudiera socorrerle y que le dio “al menos una patada”.
Alejandro Freire
En el caso de Alejandro Freire, “Yumba”, los vídeos aportados por la Policía han resultado claves para que el jurado dictamine que ese joven realizó la técnica del mataleón a Samuel. Lo intentó ahogar, recoge el veredicto, mientras Diego le seguía propinado golpes. El joven dijo en el juicio que lo cogió por la espalda para separarlo de Diego. Nadie le ha creído.
Katy Silva
Y al llegar el turno de Katy Silva el tribunal popular lo ha tenido también claro, pero en sentido inverso al veredicto dictado contra sus compañeros. Esos ciudadanos llegan a la conclusión -en contra de lo manifestado por algunos testigos- que la joven intentó detener al ahora su exnovio, Diego, cuando este propinó los primeros puñetazos a Samuel y que su intención, al acercarse a ellos, era separarlos.
Katy disfruta de libertad, al igual que Alejandro Mínguez. Los otros tres están en prisión. La situación de Mínguez podría ahora cambiar tras el veredicto y tiene muchos números de reunirse en la cárcel con sus amigos.
Agravante de homofobia en la conducta de Diego Montaña, el que inició la paliza y propinó el primer golpe
En pocos juicios se ha escuchado tantas veces la palabra “maricón” como en las sesiones del caso Samuel Luiz. Y aunque la fiscal no acusó por delito de odio (ha sostenido que en ese brutal ataque confluyeron varios motivos), el jurado sí que relata en su veredicto que la conducta agresiva y violenta de Diego Montaña tenía un motivo claro: "su animadversión hacia la condición sexual homosexual que le atribuyó a la víctima”. Así que esos ciudadanos piden, en el caso de este culpable, que se aplique la agravante de homofobia en su condena.
La fiscal fue implacable: ese ataque fue la exhibición de una violencia con “la que el grupo disfruta”
La fiscal fue implacable en sus alegatos finales. Samuel presentaba hasta 21 golpes diferentes por todo el cuerpo lo que sólo puede explicarse por la exhibición de una violencia, “con la que el grupo disfruta”. Dijo que los acusados actuaron como “una jauría humana” a la caza de su presa. El padre de Samuel relató que a su hijo “lo dejaron morir, tirado en la calle, como un perro”.
Y la fiscal también fue muy clara al dirigirse a los nueve ciudadanos antes de que se encerraran a deliberar: “Samuel solo les tiene ahora a ustedes”. Recordó a esos jurados que no debían dejarse influir por “la apariencia de vida normal” exhibida por los acusados en el juicio (algunos lloraron al escuchar el relato de los hechos), porque detrás de esa imagen se esconde “la maldad”.
Solo en el caso de Katy Silva y Alejandro Mínguez (los dos que están en libertad) la fiscal se mostró más benévola. No se opondría, dijo el pasado lunes, a que les condenaran en vez de por asesinato, como cómplices. Así ha sido en el caso de Alejandro Mínguez, ahora con muchos números de ser enviado a la cárcel. Pero no con Katy, así que habrá que esperar a ver si la fiscal mueve ficha y recurre la sentencia, cuando se dicte su absolución.
Kaio Amaral, que hoy ha seguido la lectura del veredicto sin levantar la cabeza, es el que se enfrenta ahora a la máxima de las penas solicitadas (27 años de cárcel) pues además del asesinato con alevosía se le considera autor de un delito de robo. Se llevó el teléfono móvil de Samuel Luiz, cuando este agonizaba tirado en el asfalto.
La acusación insistió en el delito de odio: “lo que te gritan cuando te matan es importante y a Samuel le gritaron maricón”
Para la acusación particular tendría que haberse aplicado la agravante de odio. “Lo que te gritan cuando te matan es importante y a Samuel le gritaron maricón”, recalcó el letrado que defiende los intereses de los padres del joven. Ese abogado recalcó que Samuel no tuvo ninguna opción de defensa y que sufrió en ese brutal ataque al menos seis paradas cardiacas. Tampoco se ha podido determinar que fuera un golpe concreto el que acabó con su vida. Murió por la salvaje paliza.
La ficha del ministerio público
El macho alfa, la dulce niña, el mentiroso, el que se creía el primero y el lugarteniente del líder
La fiscal se permitió la licencia, en aras a ser lo más descriptiva posible en su alegato final dirigido al jurado, de definir la conducta y carácter de cada uno de los acusados.
Diego Montaña es, “el macho alfa”; Alejandro Freire, Yumba, “el lugarteniente del líder; 'Katy' Silva, ”la dulce niña Catherine“, que quiere vivir con un macho alfa y comparte el gusto por la violencia; Kaio Amaral Silva, ”el que se creía el primero de la clase al ir a la Policía“ y Alejandro Míguez, ”el mentiroso". El mismo admitió en 3 ocasiones que ha contado, en este caso, muchas mentiras.
El jurado descarta las atenuantes por consumo de drogas y a alcohol
El jurado no considera ninguna atenuante, a la hora de fijar las condenas de cárcel para los culpables, por ingesta de alcohol o drogas. Fue uno de los argumentos de las defensas, con poco margen de maniobra en este caso por impecable trabajo policial. Los investigadores consiguieron identificar sin dudas, en las grabaciones de la brutal paliza, a los agresores. Si ninguna duda, como ahora corrobora el tribunal popular.
Tras conocerse el veredicto, los abogados de las defensas reformulan sus peticiones de condena
Una vez conocido el veredicto, los abogados de las defensas hicieron una nueva petición de penas para sus clientes
Para Alejandro se piden 15 años (el fiscal 22). El el caso de Alejandro Míguez (fiscal 13) se solicitan 7 años. Para Kaio Amaral (fiscal 27 años) la defensa implora 15 años y para Diego Montaña (que podría acercarse a los 27 años con las agravantes) la defensa pide 20 años.