Los test de antígenos están desafortunadamente de moda por la alta incidencia de la variante ómicron. Muchas personas se han familiarizado con ellos esta pasadas Navidades para intentar minimizar el riesgo en los encuentros familiares. La mayoría de ellos requieren de un frotis nasal para detectar un posible contagio. Sin embargo, con la irrupción de ómicron, algunos expertos apuntan a que una muestra de garganta es más fiable que una nasal para la detección de un positivo mediante este test.
Es verdad que hay algunos estudios preliminares, como el que ha llevado a cabo la Universidad de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, que apuntan en esta dirección. Sin embargo, a ojos de algunos especialistas, estas investigaciones son poco consistentes todavía.
Una sanitaria toma una muestra de la garganta de una niña ayer en Jerusalén
La OMS calcula que más del 50% de los europeos se contagiará con ómicron en 6 u 8 semanas
“Antes de cambiar dinámicas, es necesario llevar a cabo estudios más sólidos, que todavía no existen, donde se comparen personas a las que se les haga un test con una muestra nasal con individuos a los que se les tome una de garganta”, explica a La Vanguardia el doctor Bonaventura Clotet, director del IrsiCaixa. “Posteriormente –añade- se hará necesario también practicar pruebas PCR para comprobar la sensibilidad de las distintas muestras”.
Lee tambiénCoronavirus | Datos, nuevas variantes y últimas noticias, en directo
Para Clotet, lo importante, sobre todo, es hacerse este tipo de test, también las PCR, de forma repetitiva en un espacio de tiempo corto, cada 48 horas. “Si se hacen una sola vez no te dicen nada”, afirma. E incluso sostiene que es más importante esta reiteración, si cabe, con la variante ómicron.
Lee tambiénÓmicron empieza a asomarse a los hospitales, todavía copados por la delta
Y lo dice por una investigación llevada a cabo recientemente por el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas de Japón (NIID, por sus siglas en inglés) y de la que Clotet ha tenido constancia gracias al doctor Roger Paredes, miembro de su equipo y jefe del servicio de enfermedades infecciosas de Can Ruti. Este estudio, realizado en personas vacunadas, señala que el pico de contagiosidad, de carga viral, de ómicron en un individuo positivo se alcanza a partir del tercer día (y hasta el quinto o sexto) del inicio de los síntomas.
En este sentido, y según Clotet, “ómicron se comporta de manera similar a otros coronavirus, como el SARS-CoV-1 y el MERS, en los que cuando aparecían los síntomas había poca cantidad de virus y a medida que pasaban los días su presencia aumentaba”.
Hay que repetir el test de antígenos entre el tercer y el sexto día de síntomas y también entre el séptimo y el noveno"
“Eso quiere decir que cuando aparecen los síntomas por ómicron y te haces un test de antígenos, es probable que no te detecte la infección, incluso con una PCR”, subraya este doctor. “Por eso es importante testear cada 48 horas cuando hay una clínica de resfriado, mocos, dolor de cabeza… Hay que repetir el test de antígenos entre el tercer y el sexto día de síntomas y también entre el séptimo y el noveno”, agrega.
Para el director del IrsiCaixa, “ómicron no escapa a los test de antígenos rápidos", sino que la clave reside en "cuándo es detectable la infección, y en el caso de esta variante no es en el inicio de los síntomas, sino entre el tercer y el sexto día”.
Lee tambiénLos expertos ven prematuro "gripalizar" la covid
Salvador Macip, genetista e investigador de la Universidad de Leicester (Reino Unido), coincide con Clotet. Entiende, por una parte, que bien usados, los test de antígenos son útiles y, por otra, que “todavía no hay suficientes datos para afirmar que a través de una muestra de garganta se detecta mejor ómicron que por vía nasal”.
Admite que los primeros estudios apuntan a una mayor sensibilidad de la muestra bucal, ya sea vía PCR o test de antígenos, pero al ser estas investigaciones tan preliminares, apuesta por tomar muestras de los dos lugares, garganta y nariz.
Una mujer se hace un test de antígenos
Aunque la mayoría de test de antígenos que están en el mercado funcionan con una muestra nasal, “en Reino Unido los expertos están aconsejando tomar de nuevo una doble muestra, como se hacía en el inicio de la pandemia, aunque más tarde se empezaron a coger sólo a nivel nasal”, relata Macip.
La idea, según cuenta, es tomar primero una muestra bucal y luego, con el mismo hisopo (bastoncillo), una nasal. “En la bucal, tienes que intentar llegar casi a la zona de las amígdalas, pero no es mucho más incómodo que coger una de la nariz, donde también tienes que introducir bastante el bastoncillo. Si se hace un frotis suficiente y bastante profundo, la efectividad es razonablemente alta”, defiende. “Y si se hace de manera adecuada, me refiero de forma repetitiva, no uno solo, funcionan bien”, agrega.
Lee tambiénQuién podrá recibir la pastilla contra la covid en España y cómo se administrará
Es lo que han hecho las autoridades británicas con el inicio del curso escolar, realizar un test de antígenos a cada niño dos días antes de ir a la escuela y un segundo el mismo día del inicio de las clases. “Es evidente que alguno se te escapará, pero detectarás muchísimos casos. Lo que no funciona es hacerse un único test. Tres negativos seguidos te dan más tranquilidad que uno solo”, sostiene este investigador.
A diferencia de Macip, el doctor Tomàs Pumarola, jefe del servicio de microbiología del hospital Vall d’Hebron, entiende que es más dificultoso tomar una muestra de garganta que una nasal. “Es mucho más complicado, y más molesto. Si te lo hace personal de enfermería no hay problema, pero si lo tenemos que hacer nosotros mismos es más complejo”.
Dos muestras dan mucha más sensibilidad que hacer una solo ya sea de una u otra parte"
En lo que sí coincide es en la mayor fiabilidad de la doble muestra. De hecho, sostiene que con otros virus respiratorios “es lo que da mejor resultado, ya sea con dos frotis distintos o con el mismo bastoncillo”. Cuenta que generalmente se hace con dos escobillas pero que ambas se introducen en el mismo tubo que contiene la solución. “Dos muestras dan mucha más sensibilidad que hacer una solo ya sea de una u otra parte. Con la gripe, por ejemplo, tomamos las dos”.
Subraya la importancia de que el frotis sea de garganta, casi llegando a las amígdalas - “no vale ni de saliva ni un frotis de las encías”, esgrime- y vaticina que, probablemente, con este coronavirus se acabará por tomar “doble muestra también, nasal y de garganta”.
Lee tambiénEl nuevo antiviral de Pharmamar podría prevenir hospitalizaciones y muertes por covid
Pumarola explica que en la mayoría de test de antígenos que están en el mercado, “el fabricante, en la hoja técnica, solo puede detallar lo que ha comprobado previamente”. En este sentido, esgrime que los estudios que han hecho para lanzar el producto han sido con muestras nasales y que “por eso no pueden detallar nada de la garganta”. “Otra cosa es que la gente le de ese uso también”, aclara.
Respecto a los test específicos de saliva que también se pueden encontrar en las farmacias, afirma que “son algo más complicados”. “La saliva no es una muestra fácil. Es necesaria una preparación previa, de limpieza de la boca. Si acabamos de comer, puede haber algo en la saliva que distorsione el resultado. A veces, además, no sabemos si el producto está pensado para la saliva o para la secreción gingival. Es una muestra más compleja”, concluye.
Participa en el DebateLas repercusiones de la variante ómicron
