La noticia de la existencia de unas fotografías en las que Genoveva Casanova y Federico de Dinamarca aparecen juntos paseando por Madrid han sacudido las redacciones de las principales revistas de crónica social en España. Era Vanitatis el medio encargado de adelantarlo este martes, a horas de su publicación en papel, aunque sin mostrar las imágenes de la discordia.
Horas después, las fotografías llegaban a la primera cadena de televisión en mostrarlas antes, incluso, de ser difundidas por la prensa. El programa de Telecinco TardeAR, con Ana Rosa Quintana a la cabeza, ha sido el primer lugar en el que el documento gráfico ha visto la luz, pasadas las siete de la tarde del martes, con la difusión de la portada que llevará esta semana la revista Lecturas.
Antes de su emisión, la presentadora del programa aseguraba haber hablado con la propia Casanova, quien habría desmentido la relación amorosa con el heredero de la corona danesa. "Me ha dicho que ella tiene una relación de amistad con el príncipe heredero de Dinamarca desde hace años, y niega rotundamente que haya ninguna relación romántica entre ellos", contaba en TardeAR.
Ana Rosa, además, ha adelantado que la cuestión ya está en manos de los abogados de Genoveva, "para aquellas personas que vayan más allá de lo que ella dice que ha pasado, que es unos amigos que se ven en Madrid", ha asegurado Quintana antes, incluso, de ver ella misma las fotografías.
Federico de Dinamarca durmió en casa de Genoveva Casanova
Luis Pliego, director de la revista Lecturas, ha dado más detalles en el programa de Telecinco sobre el contexto de las fotografías de Genoveva Casanova y el príncipe Federico de Dinamarca. "Salen a eso de la una de la madrugada del Corral de la Morería, se meten ambos en un coche y se dirigen a casa de Genoveva después de cenar", relataba.
"Viene lo importante: entran en casa de Genoveva, es ella la que abre, él va detrás, los fotógrafos duermen a la puerta de la casa y a las 8:30 de la mañana, Federico de Dinamarca sale de esa casa con una maleta de viaje para volar a Copenhague", sigue contando. Pliego, además, asegura que "entraron por separado" a la vivienda de Casanova "y salieron con otra ropa", lo que confirma que el príncipe danés pernoctó en ella.