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ecir Nochevieja es decir televisión. La Nochevieja será televisiva o no será (por muchos Twicht que vengan), y más si nos quitan las madrugadas callejeras. Lo mejor de esta Nochevieja televisiva ha sido José Mota: Cuento de Vanidad , a cuento del cuento de Dickens, ha sido un alarde narrativo y cómico, de alta calidad visual. José Mota confirma su excelencia como comediante, este año parodia nuestro gusto por el like como termómetro de autoestima y satiriza las jaurías digitales contra el chiste malo, el humor, el lenguaje no inclusivo, la incorrección ideológica... El talento artístico de José Mota le habilita para virar del cachondeo al panegírico de la sanidad pública y los sanitarios, como broche de su Cuento de Vanidad , con emoción, solvencia y credibilidad. Mota, sobresaliente.
PEDROCHE. Las campanadas son como las religiones: hay muchas, y solo unas son las verdaderas. La 1, Anne Igartiburu vestida de rojo, como debe ser (la ausencia de la Obregón representa a tantos infectados). La 1 es el catolicismo, y Antena 3 el protestantismo: Cristina Pedroche... que este año ha timado a sus seguidores al hurtarles su cuerpo tras un vestido de cucaracha. En TV3, todo muy correcto... hasta que Elena Gadel besa en los morros al bueno de Llucià Ferrer, para que debatamos durante esta semana si el beso estaba o no guionizado.
CARRÀ. Rafaella Carrà no se ha ido. Raffaella Carrá ha estado en casa esta Nochevieja, dueña de la tele, hoy y siempre. Desde Cachitos (La 2, TVE) se confirma como clásico del entretenimiento, la canción y la fiesta, heroína y musa de una tele sensual y vital. Como Guille Milkiway dice en el programa, Raffaella era pura verdad. Canonizada Santa Raffaella, ya no habrá Nocheviejas sin ella en la hornacina del televisor.
PADILLA. Dice a sus amigas Paz Padilla que “la vacuna no sirve para nada”. Ha querido decir que puedes infectarte. Querida Paz, la vacuna sirve para una cosita: para que no mueras. Repite conmigo: la vacuna sirve para que no mueras. Es lo que va de nada a todo, esos dos adverbios de grado. Di “la vacuna no sirve para que no te infectes, solo sirve para que no te mueras”, y así quizá le salvarás la vida a alguno de tus admiradores. Feliz 2022, amiga Paz. – @amelanovela