‘El Hormiguero’: Revilla descarta el confinamiento “porque la gente y la economía no lo aguantan”
El presidente cántabro se mostró optimista ante el futuro de la pandemia
Pablo Motos recibía en el plató a uno de los invitados clásicos de su programa. Las puertas de El Hormiguero se abrían, por vigésima vez, para Miguel Ángel Revilla . El presidente cántabro analizó la actualidad, pero también quiso aclarar la polémica foto en la que daba la salida a una prueba deportiva en la que no las mascarillas y la distancia social brillaban por su ausencia.
El invitado entró al plató saludando a Motos con un toque de pies y sin quitarse la mascarilla hasta que no estuvo en la mesa. Una vez allí, se desinfectó las manos y quiso revisar que se cumplía con un metro y medio de distancia. Esa preocupación le serviría para dejar claro que sí respeta las medidas de seguridad.
El presentador valenciano quiso abordar rápidamente la imagen que el pasado fin de semana circuló por redes sociales. Revilla quiso dejar claro que ese acto deportivo “estaba autorizado” y que los deportistas no llevaban mascarilla porque tenían que lanzarse al mar a nadar a los pocos segundos. También explicó que todos se habían sometido “a las pruebas pertinentes”.
Sobre la pandemia de coronavirus también hablaron, aunque Pablo quiso zanjar el asunto en pocos minutos porque “la gente está hasta el gorro”. El entrevistado apostó por seguir dinamizando la economía porque entonces el virus que nos matará será el del “hambre” y la “pobreza” después de un desastroso verano.
Su optimismo no acabó ahí, ya que sobre el futuro vaticinó que no habrá un nuevo confinamiento total en nuestro país “porque la gente y la economía no lo aguantan”. Sobre la situación vivida entre marzo y junio en España, quiso reconocer y aplaudir que la ciudadanía se comportase de “forma ejemplar”, aunque ahora ve “mucho desmadre”.
Aunque comenzó la noche optimista, el nivel de enfado del invitado de El Hormiguero fue en aumento según tocaban temas espinosos. Sobre la marcha del rey emérito de España, aseguró que le gustaría que volviese a España y pidiese perdón, como ya hizo en el pasado con otras polémicas. Otro de los señalados por el cántabro fue Pedro Sánchez, con el que aseguró no tener relación.
Durante los meses más duros de la pandemia, en las conferencias de presidentes de comunidades autónomas de los domingos, aseguró que él era el único que hacía preguntas al jefe del Ejecutivo, aunque nunca le respondía. “Ojalá hubiese la misma camaradería en el Parlamento”, decía visiblemente molesto.
Albert Rivera, que acudirá al programa de Pablo Motos la próxima semana, también fue señalado. El invitado se lamentaba por haber apostado por él como “futuro presidente del Gobierno”. Además, le quiso preguntar el motivo por el que rechazó una coalición con el PSOE para gobernar junto a Sánchez. “No entiendo qué pasa en las cabezas algunas veces”, decía desilusionado.