Desde que Elon Musk compró definitivamente Twitter todo son incertidumbres para sus empleados. A la reducción de plantilla que llevó a cabo el magnate a su llegada hay que añadirle el abandono de buena parte de sus empleados el pasado viernes después de recibir un ultimátum por mail en plena madrugada. Según estiman medios estadounidenses, la plantilla de Twitter se habría quedado en alrededor de 2.000 trabajadores de los más de 7.500 que había a su llegada.
La última de las malas noticias que han recibido los que aún resisten en plantilla es la eliminación del almuerzo gratuito al que tenían derecho hasta ahora. El magnate asegura que las comidas gratuitas en la sede de San Francisco le están costando a la compañía cerca de 400 dólares por empleado. El descontento de los trabajadores es doble porque todos ellos tendrán que trabajar obligatoriamente en las oficinas de la compañía, ya que una de las primeras cosas que hizo Musk fue acabar con el trabajo remoto.
A su llegada, Elon Musk anunció su intención de eliminar el trabajo remoto
Según informa The New York Times, el CEO pretende ahorrarse un total de 13 millones de dólares al año con la eliminación del almuerzo gratuito en la oficina de San Francisco. Recientemente, el magnate tuiteó que, a pesar de que casi nadie había ido a la oficina a lo largo del último año, el coste estimado por almuerzos durante los últimos 12 meses era de 400 dólares.
La ex vicepresidenta de transformación laboral de la compañía Tracy Hawkins respondió asegurando que eso era mentira. “Manejé este programa hasta hace una semana cuando renuncié porque no quería trabajar para Elon Musk. Para el desayuno y el almuerzo hastamos entre 20 y 25 dólares por día y persona. Esto permitió a los empleados trabajar durante la hora del almuerzo y las reuniones. La asistencia fue del 20 al 50% en las oficinas”, rezaba el tuit.
Siguiente el cruce de acusaciones, Musk respondió a la ex trabajadora asegurando que eso era falso, “Twitter gasta 13 millones de dólares al año en servicios de alimentación para la sede central en San Francisco. La insignia en los registros muestra que la ocupación máxima fue del 25%, la ocupación promedio fue interior al 10%. Has más gente preparando el desayuno que desayunando”.
La intención del magnate de comenzar a cobrar por el almuerzo provocó un debate en la red social, que ya experimenta problemas por la drástica falta de personal. Según medios especializados estadounidenses, casi el 75% de la plantilla de Twitter ha abandonado su trabajo, lo que ha llevado al multimillonario a suplicar la incorporación de “cualquiera que realmente programa software”. Además, Musk invitaba a los interesados a viajar a San Francisco para tener una entrevista personal, “estaré en la sede hasta tarde este viernes y el sábado, de regreso”.
Numerosos exempleados han decidido tomar la palabra y exponer vía Twitter su experiencia y los motivos que les han llevado a abandonar su trabajo. Es el caso de Peter Clowes, un ex trabajador de la compañía que asegura que abandonó su trabajo por la incertidumbre en la que se encuentra Twitter. “Me fui porque ya no sabía para qué me quedaba. Anteriormente me quedan por la gente, la visión y por supuesto, el dinero (seamos honestos. Todo ha cambiado radicalmente o es incierto”.
El descontento de la plantilla se hizo evidente con la proyección de insultos contra Musk en la fachada principal de la sede de Twitter en San Francisco. En la madrugada del pasado viernes podían leerse calificativos como “parásito supremo” o “especulador del apartheid” dirigidos al multimillonario. Los intentos de sabotaje por parte la plantilla son una amenaza para el nuevo propietario, que se encuentra preparando la Copa del Mundo de la FIFA 2022, un evento muy esperado y seguido en la plataforma.