¿Apasionado de los crímenes macabros? Aquí una serie para los morbosos
La recomendación
Octavia Spencer es una buena protagonista
Necesitaríamos más series como Truth be told. Todavía no sé muy bien si es una buena serie o simplemente es muy entretenida pero lo importante es que sacia la sed de morbo. Cuando hablo de morbo, quiero decir esa obsesión que tienen ciertos individuos de querer saber todos los entresijos de los crímenes, de acusar personas desde el sofá, de saber detalles sobre las víctimas que quizás no deberían hacerse públicos. En este sentido, Truth be told es un festín.
Es una historia de ficción. Poppy Parnell (Octavia Spencer), una periodista de investigación, se da cuenta que podría haberse equivocado cuando escribió multitud de artículos sobre un joven acusado del asesinato de su vecino, un padre de familia al que apuñalaron y desangraron en casa mientras su familia estaba dormida. Poppy es consciente que su análisis del chaval Warren Cave (Aaron Paul) marcó la opinión pública, cosa que le convenía para su carrera, y dos décadas más tarde piensa que podría ser inocente.
Tiene carnaza: un nazi condenado por asesinato (que podría ser inocente) y gemelas que podrían ser diabólicas”
El desafío de la periodista es estudiar de nuevo el caso a pesar de las dificultades. Para empezar, debe sobreponerse al hecho de que el condenado ahora es un nazi tras pasar tanto tiempo en prisión (y ella es negra). Y, sobre todo, deberá inmiscuirse en los asuntos de las hijas de la familia Buhrman (ambas interpretadas por Lizzy Caplan), que supuestamente estaban dormidas durante el asesinato.
Es como si la creadora Nichelle Tramble Spellman fuera amante de los podcasts criminales, sobre todo de Serial de Sarah Koenig que marcó un antes y un después en el formato radiofónico en 2014, y se hubiera pasado los últimos meses leyendo las noticias, reportajes y crónicas más sensacionalistas de los periódicos con la brújula moral más estropeada.
Truth be told es carnaza hecha sin sutileza: sólo hay ver que las esvásticas que lleva tatuadas Warren Cave para darse cuenta, la idea de las gemelas posiblemente diabólicas o incluso una fotografía de color verde que le da una atmósfera irreal a la investigación. Su intencionalidad tan clara y honesta, sin embargo, permite abrazarla tal y como es, con la tranquilidad de saber que Tramble Spellman no se basa en personas reales sino en una novela de Kathleen Barber llamada Are you sleeping.
Con la oscarizada Octavia Spencer (Criadas y señoras, La forma del agua, Figuras ocultas) en el papel principal, que siempre arroja talento allá donde pisa, el thriller psicológico tiene una mirada potente en la que asentarse. Puede que sea un entretenimiento para amantes de la crónica criminal y siempre será mejor que el remake de Se ha escrito un crimen que estuvo a punto de protagonizar esta década.
Como mínimo, Truth be told tiene a Reese Witherspoon detrás como productora ejecutiva y ya sabemos lo que esto conlleva: encontrarte con un personaje femenino sólido como demuestran las series Big little lies o The Morning Show o películas como Alma Salvaje y Perdida. Witherspoon ya es sinónimo de papeles jugosos para las actrices.
Octavia Spencer siempre arroja talento allá donde va”