La Federación Estatal de Asociaciones de Empresas de Teatro y Danza (Faeteda) sitúa la caída de la facturación entre un 50% y un 70% por el impacto de la pandemia. La Federación de asociaciones de profesionales de Circo de España (CircoRed) prevé una lenta recuperación ante la incertidumbre en las ayudas directas. En este contexto, el Festival del Circo Trapezi y el COS (Festival Internacional de Movimiento y Teatro Gestual) de Reus han buscado nuevas fórmulas para seguir acercando los espectáculos a la gente. Dos eventos culturales que han recibido durante años el apoyo de Reale Seguros a través de su fundación Reale Foundation.
La concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Reus, impulsor de ambas iniciativas artísticas, tuvo clara la decisión a tomar ante el confinamiento, las sucesivas curvas alcistas en los contagios y las restricciones de movilidad.
Reconducir los festivales y buscar fechas posteriores a las previstas inicialmente para llevarlos a cabo. Trapezi, que ha alcanzado la 25ª edición, quedó pospuesto del mes de mayo a julio. Sin embargo, la coincidencia con una nueva ola covid obligó a un segundo aplazamiento para el otoño.
Las preocupaciones del consistorio fueron básicamente dos. “Identificar a los principales afectados, es decir, las compañías, los artistas y el sector cultural. Y los niños, porque fueron los que estuvieron confinados de una manera más intensa y con una vuelta a las escuelas muy dura”, explica Daniel Recasens, concejal de Cultura del ayuntamiento.
La cultura no se ha parado, era muy necesaria y muy útil especialmente en tiempos de pandemia”
Este es el motivo que explica la programación del Trapezi 2020 en las escuelas y su reconversión en una edición muy distribuida territorialmente por toda la ciudad. De esta manera logró evitar un peligro de movilidad y desatascar la dinámica de seguir posponiendo y suspendiendo actuaciones, sobre todo las internacionales. El resultado fue más que positivo. Aproximadamente el 80% de las compañías participaron en el proyecto.
Recasens revela que “ver la reacción y la sonrisa de los niños en la escuela compensa muchísimo”. El hecho de trasladar el Trapezi y el COS al ámbito escolar era también “una manera de que los niños pudieran ver que se podía seguir adelante, de hacer frente al miedo lógico de las familias y acercar la cultura a la población”.
Defensa del artista
Paralelamente, fue el modo de que Trapezi diera la posibilidad de trabajar a los artistas y no perdieran unos ingresos económicos. “Lo hemos dicho muy convencidos. La cultura no se ha parado, era muy necesaria y muy útil especialmente en tiempos de pandemia. Como administración pública nos tocaba que no se parara”, subraya Recasens.
La actividad del festival dedicada a la feria y mercado profesional de compañías artísticas pudo realizarse con normalidad durante el mes de julio. Con todas las medidas de higiene y seguridad implementadas.
Para el consistorio era importante dar respuesta a la siguiente pregunta. ¿Qué sucede con el artista si finalmente no puede realizarse el festival? Recasens considera que el concepto establecido tradicionalmente de que solo se cobra si se actúa menosprecia toda la fase anterior de preparación. “La covid ha ayudado a ver muy claramente que al artista se le ha de concebir como todo un proceso creativo, no únicamente como una única actuación final” sentencia.
En caso de cancelación final del espectáculo los artistas contratados para el Trapezi pueden cobrar las dos primeras fases de su participación: la preparación y entrega a la organización de una grabación breve de presentación de su espectáculo y, por otro, la participación en la feria profesional.
Incertidumbre y metodología de trabajo
La Covid-19 también ha generado nuevas formas de trabajo en la concejalía de Cultura de Reus. Acostumbrarse a estar pendientes de la última hora de la pandemia y a tomar decisiones basándose en los índices de rebote. Para ello ha aprendido a contextualizar estos datos con la situación concreta de la ciudad, del territorio y del país. El motivo reside en que Trapezi y COS son festivales que generan mucha movilidad y movimientos internos grupales dentro de la ciudad.
La consecuencia práctica ha sido que la pandemia les ha obligado a tener planificado un plan A, B y C. Llegaron a programar tres ediciones diferentes del Trapezi y los hubieran podido llevar a cabo los tres. Cualquiera de estas programaciones contemplaba la posibilidad de tener que volver atrás. Esta metodología de trabajo permitió al consistorio adaptarse a la nueva normalidad, a pesar de que se implementaran medidas de seguridad muy restrictivas.
En este sentido, Recasens reivindica a todo el equipo de trabajadores. Han demostrado que siempre están cuando hace falta y su gran implicación física e intelectualmente han hecho posible tirar adelante un trabajo tan ingente de concepción y de preparación de ambos festivales. Sin olvidar el agotamiento profundo y la complicada gestión emocional de las constantes curvas de contagio.
Sentimiento de comunidad
Este volumen de trabajo ha llegado a buen puerto gracias, también, a la intensa sensación de comunidad y de bloque que ha propiciado la pandemia. Trapezi cuenta con una dirección artística, pero también está impulsada por la Generalitat a través del ICEC (Institut Català de les Empreses Culturals) y la Diputación de Tarragona. “Desde el minuto cero dijeron, adelante”, asegura Recasens.
Para el concejal de Cultura de Reus la clave ha residido en que todos los implicados se han volcado en el trabajo en equipo, con muchas ganas de que las cosas pasaran y al gran entendimiento logrado.
Lecciones
Daniel Recasens afirma que la pandemia ha evidenciado la importancia de ser resiliente, de ser muy flexible. Ha demostrado que la incertidumbre es un estado en sí mismo y con la cual se debe poder trabajar. Se supera con la máxima planificación posible y con una mirada amplia. Ha subrayado la necesidad de valorar en cada momento qué se ha hecho bien y mal.
Especialmente en momentos de crisis resulta básico trabajar en conjunto, “escucharse y hacer comunidad. La necesidad de hacer equipos muy próximos y aprovechar al máximo las posibilidades de contacto”. Para ello adquiere mayor relevancia la manera en que se utilizarán las herramientas tecnológicas como las videoconferencias.
En este sentido, han aprendido la relevancia de disponer de una constancia gráfica, audiovisual, de todo lo que han ido trabajando y decidiendo. El objetivo es poder acudir a ella cuando sea útil y necesario en otro momento.
En el sur de Catalunya pasan muchísimas cosas y algunas muy potentes”
La conclusión final es que todo refuerza y de todo se aprende. Recasens apela a Milan Kundera cuando rememora su célebre frase “aquello que no ha sido elegido por nosotros no podemos considerarlo ni como un mérito ni como un fracaso“.
También reivindica que lo que se produce más debajo de El Vendrell existe. “En el sur de Catalunya pasan muchísimas cosas y algunas muy potentes”. Trapezi y COS son una buena muestra de ello.