Víctor de Aldama, el presunto 'corruptor' del caso Koldo, pide declarar y el juez lo cita el jueves

El empresario Víctor de Aldama quiere hablar. Su nueva situación de prisión incondicional por un asunto de hidrocarburos le ha hecho cambiar de estrategia en las dos investigaciones que pesan sobre él. Por ahora, lo primero que ha hecho ha sido pedir al juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, que instruye el 'caso Koldo' declarar voluntariamente.

El magistrado ha acordado su interrogatorio para este jueves 21. Al interrogatorio acudirá la Fiscalía Anticorrupción, que le preguntará sobre los pagos al exministro de Transportes José Luis Ábalos, el pago de una causa en Cádiz y el pago del alquiler del piso donde vivía una pareja del exdirigente socialista, a cambio de favor en la adjudicación de contratos en su Ministerio y la apertura, gracias a sus contactos como secretario de organización del PSOE, de las puertas en otras administraciones. 

El fiscal encargado de la investigación le preguntará, a su vez, por el pago de maletines o vía transferencia al asesor de Ábalos, Koldo García, y cual era el funcionamiento de la organización.

Aldama ha tomado esta decisión después de que otro juez, Santiago Pedraz, le enviara a prisión por un caso de fraude de IVA hace un mes. Por el asunto del caso Koldo, tras su detención en febrero fue puesto en libertad.

Según la investigación, Aldama, a través de su hermano que trabajaba en el servicio de seguridad de Ábalos, accedió al entonces ministro de Transportes. En poco tiempo ya tenía vía libre dentro del ministerio, recibió más de 50 millones de euros en contratos durante la pandemia y logró importantes beneficios económicos.

Aldama participó en dos hechos que políticamente han tenido repercusión y que podría ser el momento de que el empresario diera su versión de los hechos. El primero fue el rescate de Air Europa por parte del Gobierno. De la investigación se desprende çómo Aldama trabajaba para Globalia y utilizó su relación cada vez más estrecha con Ábalos y Koldo García para lograr que el Ejecutivo hiciera una inyección económica a la empresa de Javier Hidalgo.

De hecho, Hidalgo estaba citado a declarar en el Senado en la comisión de investigación por este caso pero ha comunicado que no podrá ir al encontrarse en Estados Unidos.

Otro de los capítulos que podría aclarar Aldama es cómo se gestó la llegada de la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, a petición de él mismo y a sabiendas que esta dirigente no podía pisar territorio español por las sanciones impuestas por la Unión Europea.