Aurora Picornell, la sindicalista palmesana asesinada en 1937 en plena Guerra Civil, murió de tres tiros en la cabeza tras ser apalizada con gran violencia por sus captores. Más de 80 años después de su asesinato, empiezan a conocerse las circunstancias de su muerte gracias a la autopsia que se realizó a sus restos después de que se localizara el cadáver en una fosa común en Manacor (Mallorca). Picornell y dos compañeras que estaban encarceladas en Palma fueron sacadas de allí a la fuerza la noche de Reyes de 1937, fueron brutalmente apalizadas y torturadas y finalmente fueron ejecutadas con disparos directos a la cabeza.
La autopsia de Picornell y de sus compañeras ha salido a la luz gracias a que se ha incorporado al expediente judicial que se sigue contra el president del Parlament, Gabriel Le Senne (Vox), por romper una imagen de la sindicalista en un pleno de la Cámara. Se debatía la aceptación a trámite una propuesta de su partido para derogar de la Ley de Memoria Democrática de Baleares. Le Senne rompió una imagen de Picornell que portaba en su ordenador la vicepresidenta de la Mesa, la socialista Mercedes Garrido.
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La autopsia, adelantada por Ultima Hora, no deja lugar a dudas acerca de la violencia con que se actuó contra las mujeres. El informe forense concluye que se trató de tres muertes violentas “de carácter homicida”. En el caso de Picornell, señala que murió de tres tiros en la cabeza ya que se àprecian dos orificios de entrada en el cráneo y tres de salida. Los tiros se ubican encima de las sien, en la cara y en el occipital. La autopsia desvela fracturas múltiples en los brazos y en las piernas, lo que es una prueba de que fue sometida a torturas con gran violencia previas a su asesinato.
Hay un informe con los restos de otras dos víctimas, que todavía no han sido identificadas con exactitud, que presentan similares ataques: los dos tienen señales de tiros en la cabeza y las extremidades rotas, una evidencia de que hubo una paliza previa al asesinato. La autopsia desvela que las dos mujeres se cubrieron la cabeza con las manos antes de su ejecución ya que presentan heridas de bala en las manos.
El juez ha citado a declarar como testigo a un vicepresident del Parlament
El informe aparece en el expediente remitido al juez por los familiares de Picornell, que han presentado una denuncia contra el president del Parlament balear. El juez ha citado a comparecer como testigos al vicepresident del Parlament, Mauricio Rovira, del PP, así como a los dos letrados que asistían ese día al presidente en el pleno en el que se produjo el incidente.
En su declaración ante el juez, Gabriel Le Senne insistió en que la rotura de la imagen de Picornell fue accidental y aseguró que habría hecho lo mismo con cualquier otra fotografía. Puso como ejemplo la de Francisco Franco. La familia ha entregado al juez un completo informe con opiniones de Le Senne vertidas en las redes sociales antes de ser president con las que buscan acreditar que sí hubo una intención política.