La ley de Amnistía recibe el aprobado definitivo del Congreso de los Diputados sin mayoría absoluta del independentismo en el Parlament de Catalunya. Cuando se escriba la historia de estos años inciertos, ese cruce de vías aparecerá en el mapa.
Trabajada ley de Amnistía sin mayoría secesionista en el Parlament. ¿Secesionistas? En realidad, la secesión no la intentaron llevar a cabo. La simularon mientras se acusaban de traición. “Ciento cincuenta y cinco monedas de plata”.
El Congreso da luz verde a la ley de Amnistía en un debate de alta tensión
Amnistía sin mayoria independentista en Barcelona. Ese cruce de vías no estaba dibujado hace un año. Nos habría parecido imposible. Con el adelanto electoral del 23 de julio del 2023, Pedro Sánchez aspiraba a repetir la mayoría parlamentaria del 2019 con Sumar en lugar de Podemos. No lo logró. Tuvo que pactar con Junts, pagando un precio que disgustaba a más de media España, con intensidades diversas, con matices diversos. Y en España, aunque no lo parezca, siempre hay que prestar atención a los matices. Hace ahora un año, Carles Puigdemont ya entreveía la posibilidad de salir del ostracismo, y Esquerra aún creía posible mantenerse como primer partido catalán gestionando en solitario la Generalitat. Después de más de dos décadas de espesa pelea táctica, convergentes y republicanos no imaginaban que un día el independentismo perdería la mayoría en el Parlament. Siempre estaría la CUP para echarles una mano. Se creían poseedores de una renta vitalicia.
“Todos dentro”: se abre una nueva fase política que debe pasar por el torno de las europeas
Han sido seis meses de altísimo voltaje. El llamamiento de José María Aznar a la movilización permanente de la España nacional y del aparato del Estado, sobre todo del aparato del Estado: “El que pueda hacer que haga, el que pueda aportar que aporte”. Seis manifestaciones consecutivas del Partido Popular en la capital de España (plaza Felipe II, puerta del Sol, Cibeles, Templo de Debod, plaza España y plaza de la Independencia) en seis meses. Concentraciones de jueces con toga. Significativas instrucciones judiciales, tensión máxima en el circuito mediático y el simulacro insurreccional de Vox en la calle Ferraz de Madrid, que recibió la visita de Tucker Carlson, figura estelar de la extrema derecha estadounidense, oficial de enlace entre Donald Trump y Vladímir Putin. Carlson dijo en Madrid, en noviembre del 2023: “Si alguien quiere saber cómo serán los próximos diez años en Occidente, que mire a España”.
Si el independentismo hubiese ganado las elecciones del 12 de mayo, Sánchez estaría hoy noqueado, en el PSOE se estaría hablando de comisión gestora, el reconocimiento de Palestina quizás no se habría producido por miedo a la reacción de Israel, Alberto Núñez Feijóo acumularía más de diez puntos de ventaja en las encuestas de las elecciones europeas, y Felipe González se estaría fumando el puro más grande de La Habana. Como sabemos bien, el independentismo perdió la mayoría en las elecciones catalanas. Es significativo que hoy buena parte de los comentarios escritos en Madrid pasen por alto tan singular detalle, tan fundamental detalle.
Miriam Nogueras interviene en el Congreso de los Diputados antes de votarse la ley de la Amnistía
La aprobación de la ley de Amnistía significa “todos dentro”, la apertura de una nueva fase política en España, pero hay que esperar al resultado de las europeas para ver cómo será el despliegue de lo nuevo.
Embriagado por sus recientes golpes de efecto –el mitin de Madrid con Javier Milei y la foto de Jerusalén con Beniamin Netanyahu –, Vox jugó ayer a reventar el pleno del Congreso y consolidó la agrupación del voto progresista alrededor del PSOE. (Sumar va a sufrir en las europeas). Feijóo necesita que Ursula von der Leyen le dé oxígeno este fin de semana para intentar romper el empate que señalan las encuestas. ERC podría convertirse en un coche sin conductor, y Puigdemont, ayer bastante contenido, no sabe con qué fuerza de coerción contará en los próximos meses. No sabe si Feijóo estará en condiciones de enviarle señales en morse que le permitan amenazar a Sánchez con la interrupción de la legislatura. Aún no está decidida la investidura del presidente de la Generalitat.
Isabel Díaz Ayuso ya se puso ayer el frente de la manifestación ante el Tribunal Constitucional. Con Vox al galope y la presidenta de la Comunidad de Madrid marcando el terreno, Feijóo puede tener algunos problemas con el transmisor de morse.
La ley de Amnistía desemboca en las elecciones europeas. Todo pasa por el día 9.
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