El Gobierno de Pedro Sánchez ha logrado finalmente convalidar el decreto ley de medidas para hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la guerra de Ucrania con 176 votos a favor y 172 en contra, gracias en particular al apoyo de los grupos vascos, PNV y EH-Bildu y el PDECat, en un pleno marcado por el caso Pegasus de espionaje al independentismo que ha provocado el voto en contra de ERC, socio habitual del Ejecutivo de coalición, y severas críticas y recriminaciones del resto de aliados e incluso desde su parte morada.
Con todo, el decreto, que se tramitará como proyecto de ley, ha salido adelante con los votos de PSOE, Unidas Podemos, PNV, Bildu, PDECat, Más País, Compromís, Nueva Canarias, PRC, BNG, Teruel Existe y el de la diputada escindida de Podemos María Pita. En contra han votado PP, Vox, ERC, JuntsxCat, Cs, CUP, UPN y Foro Asturias, y Coalición Canarias se ha abstenido.
El voto a favor de EH Bildu asegura la convalidación del plan anticrisis del Gobierno
Aprobado el pasado 29 de marzo, el decreto ley contiene el plan económico del Gobierno dirigido a afrontar las consecuencias económicas derivadas de la guerra en Ucrania y el alza de precios, disparado por el incremento de costes energéticos. El Ejecutivo cifra en 16.000 millones de euros el impacto económico de todas las medidas.
Entre ellas, el límite de las subidas del alquiler, la ampliación del bono social y el ingreso mínimo vital, las rebajas de impuestos y peajes en la factura de la luz, la ampliación de la línea de avales públicos del ICO y la flexibilización de las ya aprobadas, y también el descuento de 20 céntimos por litro en el repostaje de vehículos, así como el resto de ayudas acordadas con el sector del transporte por carretera y ayudas directas para el sector primario.
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Bildu despeja la incógnita
Fue Bildu quien despejó la incógnita cuando en su turno de intervención anunció el voto favorable pese a criticar duramente al Ejecutivo. Para defender el decreto, el ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños, apeló a los grupos de la oposición a que "voten como votarían las personas que les votaron si se sentaran en ese escaño".
"Es incomprensible votar que no a este decreto. La votación de hoy no va del Gobierno. Va de ayudar a los ciudadanos que les votaron y les dieron ese escaño para que les faciliten su vida", esgrimió, asegurando que "el único fin" de los que rechazan el decreto ley es "dañar al Gobierno".
La portavoz de EH Bildu en el Congreso, Mertxe Aizpurua
La posición de Bildu era especialmente delicada, porque su diputado Jon Iñárritu es uno de los cuatro parlamentarios de las Cortes espiados con Pegasus. “Hoy miles de familias necesitan de una protección adicional frente a la crisis que estamos viviendo y sus duras consecuencias, nosotras queremos poder ofrecérselo”, dijo la portavoz abertzale, “pero que nadie se confunda: aprobaremos este decreto por la gente, no por el Gobierno, porque nuestro compromiso es para con la ciudadanía, no para con este Gobierno”, subraya, resolviendo la incógnita sobre el destino del real decreto.
“Una vez más, actuaremos con la responsabilidad que debemos a la ciudadanía y hoy aprobaremos este decreto, porque la gente no puede ni debe ser quien pague las consecuencias de los graves errores de este Gobierno”, dijo Mertxe Aizpurua.
La diputada de ERC Montserrat Bassa durante el pleno celebrado este jueves
Con este posicionamiento, Bildu ha facilitado la posición de ERC que, como ocurrió con la reforma laboral, estaba por la aprobación del decreto pero a la vez, atrapada por el escándalo Pegasus. La diputada de Esquerra Montserrat Bassa , sin confirmar explícitamente el no que previamente habían anunciado los republicanos en un comunicado, espetó a sus señorías, en una escueta y airada intervención y esgrimiendo un teléfono móvil, que si quieren saber cuál va ser el sentido de su voto "pregunten al CNI o a la ministra Robles". En un comunicado ERC había anunciado su voto, “un voto por la defensa de los derechos y libertades más fundamentales, por la defensa de la ciudadanía y la democracia" y "un primer aviso" al Gobierno, que "debe asumir responsabilidades y garantizar toda la transparencia en el caso Pegasus, un nuevo caso de represión política”.
La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras
De las fuerzas políticas catalanas, solo PDECat apoyó el decreto, como ya había dicho hace una semana su portavoz, Ferran Bel, pues tanto la CUP, como explicó Albert Botran —uno de los diputados espiados—, como Junts, por el que intervino su portavoz, Miriam Nogueras, anunciaron su voto negativo. Nogueras propuso de hecho, tumbar el decreto y que el Gobierno convocase un Consejo de Ministros de urgencia para tener este jueves otro decreto que entre en vigor este viernes.
También el PNV, por el que intervino la diputada Idoia Sagastizabal, mantuvo su voto favorable, y al igual que expresaron otros portavoces, como Iñigo Errejón, de Más País, pese a sentir que la confianza en este gobierno está en cuestión por el caso de las escuchas a disidentes políticos.
Por Unidas Podemos habló Pablo Echenique, quien no solo agradeció a los grupos vascos y el PDECat su apoyo al decreto que resuelve la votación, sino también a los que pese a votar en contra, sopesaron otro voto. Echenique expresó su respeto y solidaridad, toda vez, “mi formación política también ha sido espiada por las cloacas del Estado”.
El no de Vox y PP
En su intervención, el portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, aseguró que su formación no acepta el "chantaje" al que, a su juicio, somete el Gobierno a la Cámara con el decreto ley, mientras que Edmundo Bal, de Ciudadnos, ha acusado al Ejecutivo de "reírse" de su grupo.
Por su parte, el dirigente popular Jaime de Olano criticó que el Gobierno no incluyó en el decreto ley "ninguna medida propuesta por otro grupo": "No tienen palabra, pero el PP sí la tiene. El señor Feijóo sí la tiene", ha dicho, sin aclarar si su formación votará en contra o se abstendrá ante el plan de choque económico.
El diputado socialista Pedro Casares durante su intervención en el pleno celebrado este jueves en el Congreso
Pedro Casares, del PSOE, acusó a los 'populares' de "reírse de los españoles" por exigir rebajas fiscales pero también más ayudas y cuadrar las cuentas públicas, y se preguntó si el PP se consideraba "más digno" que otros grupos para integrar la Comisión de Secretos Oficiales tras haber "saqueado este país, incluso en los peores momentos de la pandemia con comisiones indignantes". Unas afirmaciones que encendieron la bancada popular, estallando esta a gritos e interrumpiendo el debate hasta provocar la intervención de la presidenta de la Cámara, Meritxel Batet, que llamó al orden al diputado Ricardo Tarno y también pidió silencio a sus colegas Pablo Hispán y Eloy Suárez Lamata.