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Dolors Bassa pide que no se deje caer al Gobierno de Pedro Sánchez

La cuestión catalana

La exconsellera de Treball, Afers Socials i Famílies pide que las movilizaciones por el juicio del 1-O no “tapen el impacto mediático” de las declaraciones de los presos

La consellera Dolors Bassa en una imagen de archivo

Xavier Gómez

Dolors Bassa ha pedido a los partidos soberanistas que no dejen caer al Gobierno de Pedro Sánchez ante el riesgo de que la alternativa de un ejecutivo de derechas con PP, Ciudadanos y Vox sea peor. La exconsellera de Treball, Afers Socials i Famílies, en una entrevista al programa No ho sé de RAC1 concedida desde la cárcel de Puig de les Basses que se emitirá esta noche de forma íntegra, se muestra partidaria de no aprobarle los Presupuestos Generales del Estado -que serán aprobados el viernes por el Consejo de Ministros- por ahora, si bien deja claro que una alternativa al ejecutivo que emanó de la moción de censura a Mariano Rajoy sería peor.

“Hoy por hoy, un no rotundo a los presupuestos no lo diría. Aprobarlos, tampoco. No podemos dejar caer al Gobierno de Pedro Sánchez. La alternativa a tumbar este Gobierno es mucho peor con el PP, Ciudadanos y la extrema derecha”, señala la exconsellera. Asimismo, reclama un gesto para que las cuentas se aprueben, algo que su formación, Esquerra Republicana, viene pidiendo desde hace meses. “Lo que sea, pero que le hagan”, apunta sobre el actual debate que afronta el soberanismo.

Oriol Junqueras, en una entrevista concedida a La Stampa desde Lledoners, también reclamó a Sánchez que hiciera “una propuesta” para que ERC respalde sus cuentas públicas. Y en ese mismo sentido se expresó Pere Aragonès en Els Matins de TV3 . Este martes, el vicepresident ha reiterado su postura en El Món a RAC1 y ha remarcado que prefieren un gobierno del PSOE a uno de PP, Ciudadanos y Vox, “pero ello no comporta un cheque en blanco” que permita el inmovilismo del Ejecutivo socialista.

Aragonès ha enmarcado las declaraciones de Bassa y ha reclamado que haya una mesa de diálogo entre los dos ejecutivos y que el Gobierno deje claro que se desmarca de las acusaciones de rebelión y sedición a través de las instrucciones a la Fiscalía o en las acusaciones de la Abogacía del Estado. “El Gobierno desaprovechó una oportunidad con los escritos de acusación, pero habrá más oportunidades durante el juicio, antes de la vista oral o en las conclusiones”, ha detallado el hombre fuerte de ERC en el Govern. “Sánchez debe poner razones sobre la mesa. Tiene que decir qué piensa hacer para sacar la cuestión catalana de los tribunales y llevarla a la política”, ha afirmado, recalcando que su postura ante las cuentas públicas “hoy por hoy es no”.

Con todo, el PDeCAT garantizó este lunes que la postura que adopten de cara a la tramitación del proyecto de presupuestos sería consensuada con los republicanos y con el Govern de la Generalitat.La cuestión que divide al partido y centra el debate ahora es si debe torpedear la tramitación o por el contrario permitirla para ganar tiempo. Ha habido diferentes manifestaciones públicas de las diferentes sensibilidades neoconvergentes en ese sentido, a favor y en contra de la tramitación. Por ahora, Bonvehí une su discurso al de Junqueras y pide “una propuesta concreta para Catalunya”, como ha expresado este martes en Ser Catalunya.

Bassa señala el 6 de febrero como fecha de inicio del juicio al 1-O y pide coordinación en las movilizaciones y que no manchen sus declaraciones

Bassa también lanza una advertencia sobre las movilizaciones que partidos y entidades soberanistas preparan de cara al juicio del 1-O, que vaticina que arrancará el 6 de febrero porque hay testigos de la acusación citados a declarar. Pide coordinación y, sobre todo, que no tapen el impacto mediático de las declaraciones de los presos.

“Durante el juicio habrá muchas movilizaciones, pero espero y deseo que sean coordinadas. No me gustaría que las concentraciones tapen o manchen lo que se dice en el juicio. Aquellos días el protagonismo tiene que ser nuestro”, apunta la exconsellera republicana. “El juicio tendrá mucho impacto y vendrán observadores internacionales. Es una ventana que tendremos. Hasta ahora hemos escuchado las acusaciones de una banda y nosotros aún no hemos podido explicar nuestra versión”, añade, en la línea de lo expresado por otros presos que han abogado por hacer de esta causa su particular caso Dreyfus y acusar al Estado y no sólo defenderse.