Calma otoñal en el lago de Puigcerdà
Las Fotos de los Lectores
Las primeras noticias de la existencia de este estanque datan del siglo XIII, pero se encontraron restos arqueológicos de un asentamiento humano del siglo XI
Calma otoñal en el lago de Puigcerdà.
“El otoño nos da una imagen muy diferente y mágica de lugares que ya tienen su encanto el resto del año”, explica Carles Roura en Las Fotos de los Lectores de La Vanguardia, antes de concretar: “El lago de Puigcerdà es un buen ejemplo”.
El lago de Puigcerdà es un estanque artificial situado en la parte noroeste de esta población de la Baixa Cerdanya.
El lago de Puigcerdà en otoño.
El suministro de agua del lago proviene del río Querol que es llevada hasta Puigcerdà mediante una acequia artificial.
Patos en el lago de Puigcerdà en otoño.
Las primeras noticias de la existencia de este lago datan del siglo XIII, concretamente el 2 de diciembre de 1260, tal como lo describe mosén Jaume Martí y Sanjaume en su libro ‘Dietario de Puigcerdà’.
En este dietario aparece un documento donde el pavorde de las propiedades de San Miguel de Cuixà en la Cerdanya cede a Arnald de Prat un terreno al lado del estanque.
Las hojas de los árboles se caen junto al lago de Puigcerdà.
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