Casi al mismo tiempo que se dejaban ver en Madrid los líderes de la extrema derecha europea (Orbán, Le Pen, Salvini o Wilders), se avistaba en aguas españolas un melanocetus, un depredador con aspecto monstruoso que vive en las profundidades abisales. A veces, la Providencia envía mensajes en forma de metáfora que nos ayudan a entender los peligros, y puede que sea eso lo que signifique la aparición del “diablo negro”, como se conoce vulgarmente a este pez. Es la primera vez que se avistaba una especie como esta, a la que le encanta habitar en la oscuridad y a dos mil metros de profundidad, en la superficie del océano, a plena luz del día y cerca de la costa tinerfeña. También la extrema derecha en este país estaba en las profundidades de la política y ha emergido para mostrarse como un depredador dispuesto a establecerse entre nosotros y a cambiar nuestras vidas.

El extraño rape del fondo marino y la extrema derecha se han enseñado esta semana. Es el segundo aquelarre que monta Santiago Abascal con su peña en Madrid en poco tiempo. Hace unos meses se trajo a Milei como estrella emergente; ahora, en plena ola trumpista, ha convocado al grupo Patriots for Europe, que lidera el húngaro Orban, un buen amigo de Donald Trump y el único que preside un gobierno en la UE. Son ya la tercera fuerza del Europarlamento. Ayer hicieron un mitin en un hotel próximo a Barajas bajo el lema “MEGA”, “Hagamos Europa Grande de Nuevo”, adaptación del “MAGA” (“Make America Great Again”) de Trump.
El PP se ha puesto de perfil no solo con Trump, sino también con esta cumbre borrascosa, mientras que la izquierda intenta movilizar a los suyos y rechaza las políticas trumpistas. Unos y otros deberán ajustar sus posturas si no quieren que les arrolle el tsunami reaccionario.
El melanocetus es un monstruo grotesco, de prominente mandíbula. Su apéndice dorsal está repleto de bacterias luminiscentes, una especie de algoritmo para atraer a sus presas. Cuidado con los depredadores del mar y de la política. No son de fiar y cuando atacan resultan implacables.