las gradas del Camp Nou han empezado a recuperar cierta normalidad tras el parón que ha supuesto la pandemia. Lo hicieron durante el encuentro que enfrentó el martes al FC Barcelona y el Bayern de Munich. La ampliación de aforo a 40.000 aficionados para el partido de Champions mostró una imagen más animada, a pesar de que el Barça acabara perdiendo. Entre los que quisieron disfrutar de este primer match del torneo europeo estaban los abogados de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye y Wolfgang Kaleck, letrado que le llevó la causa en Alemania. Boye defendiendo a los blaugrana y Kaleck, al conjunto bávaro, del que es un gran seguidor. Durante la media parte pudieron saludar a la delegación del Bayern, club en el que el abogado alemán tiene conocidos. Kaleck pudo departir con uno de sus ídolos, Oliver Kahn. El mítico portero del Bayern y de la selección alemana es ahora director general del club y estaba en la tribuna del Barça siguiendo la victoria de su equipo.
Boye en el Camp Nou
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