Buganvilla, la planta arbustiva más espectacular para el jardín

Jardinería

Sus hojas de colores, llamadas brácteas, suelen ser rosas, pero también las hay violetas, naranjas, rojas o blancas y protegen a las verdaderas flores que son blancas y diminutas

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Buganvilla

Buganvilla

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Con la llegada de la primavera despierta la naturaleza y los jardines se llenan de flores, especialmente de las espectaculares plantas trepadoras, algunas de las cuales, como la glicina, el jazmín, la clematis o la flor de la pasión dan llamativas flores que llenan los espacios exteriores de color y fragancia. Una de las más espectaculares y frondosas, quizá la reina de las trepadoras con flor, es la buganvilla o buganbilia.

Este llamativo arbusto oriundo de Brasil suele empezar a florecer avanzada la primavera y continúa durante el verano, aunque con el clima apropiado, podría dar flores durante, prácticamente, todo el año. La imponente belleza de esta enredadera convertirá tu jardín o fachada en algo realmente único.

Aspecto

Sus hojas de colores, llamadas brácteas, suelen ser de color rosa, pero también las hay violetas, naranjas, rojas o blancas

Sus hojas de colores, llamadas brácteas, suelen ser de color rosa intenso, pero también las hay violetas, naranjas, rojas o blancas y protegen a las verdaderas flores que son blancas y de muy pequeño tamaño. Las brácteas o hipsófilos son hojas que se producen junto a las flores y que se distinguen de las hojas vegetativas de la misma planta porque tienen distinta forma, tamaño y color.

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La buganvilla puede crecer entre diez y doce metros de altura o algo menos si se planta en maceta. Esta bella enredadera no es muy exigente en cuanto al riego, sobre todo en los meses de invierno. No conviene mojar sus hojas. Se adapta bien a todos los climas, pero se puede resentir con las temperaturas demasiado bajas y las fuertes heladas.

Buganvilla florecida.

Buganvilla florecida.

Charo Yagüe / www.charoyague.com

Cómo cuidar una buganvilla

Es importante podar en invierno, siempre que no haya fuertes heladas. Si las temperaturas descienden demasiado, es mejor hacerlo a comienzos de la primavera. Para ello, conviene retirar todos los tallos secos, débiles o demasiado largos, para estimular la producción de nuevos tallos y hacer que las nuevas hojas y flores crezcan más fuertes.

Esta planta de porte arbustivo y hoja perenne se adapta bien a casi todos los suelos, aunque agradece tierra fértil y con buen drenaje. La sensibilidad de sus raíces hace que los trasplantes no sean recomendables, por lo que conviene planificar bien el lugar exacto en el que se plantará que, preferiblemente, debe ser a pleno sol. En invierno conviene proteger sus raíces de las bajas temperaturas.

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No se debe abonar en exceso, porque podría suceder que esto impidiera la floración, aunque sí puede añadirse fertilizante con el agua de riego. Puede crecer también en maceta, aunque esta deberá ser de tamaño grande. Conviene estar muy atentos a las plagas, para solucionarlo con rapidez. La más frecuente es la cochinilla, pero también puede ser atacada por el pulgón, la araña roja y la mosca blanca.

Esta planta se multiplica por esquejes, bien sea de madera dura, tomados en cualquier época del año y plantados en arena y turba o bien por esquejes de madera blanda, que se toman a final de verano. La buganvilla es menos delicada de lo que podría parecer a simple vista, aunque conviene conocerla y atender a sus necesidades, para que luzca tan espectacular como sea posible. Es perfecta para decorar fachadas, muros, cenadores, pérgolas o cualquier otra estructura. 

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