El poderoso tifón Shanshan tocó tierra este jueves en la isla principal de Kyushu, al suroeste de Japón, y ha dejado por el momento 3 muertos, 82 heridos y un desaparecido, además de llevar a las autoridades a recomendar la evacuación de millones de personas.
El fenómeno meteorológico, el décimo de este tipo de la temporada en el Pacífico y catalogado como “muy fuerte” en la víspera por las autoridades niponas, está provocando a su paso lluvias torrenciales, inundaciones, vientos huracanadas y marejadas ciclónicas.
Las dos principales aerolíneas niponas, Japan Airlines y ANA, anunciaron la cancelación de 1.120 vuelos domésticos entre este jueves y el viernes desde aeropuertos del sudoeste del archipiélago.
El servicio de tren bala ('shinkansen') entre Kumamoto y Fukuoka también ha quedado suspendido hoy, al igual que la línea de alta velocidad que une Nagasaki y Takeo, y la mayoría de líneas locales de tren tampoco operan en la zona.
El tifón Shanshan trajo ráfagas de hasta 252 kilómetros por hora cuando impactó la isla principal de Kyushu en el sur de Japón el jueves 29 de agosto, siendo la tormenta más poderosa del año y una de las más fuertes en tocar tierra desde 1960. La Agencia Meteorológica de Japón advirtió que el riesgo de desastre por lluvias intensas podría aumentar rápidamente durante este viernes.