Las saunas para ranas se han convertido en un salvavidas inesperado para las poblaciones de estos anfibios en peligro de extinción. Un estudio publicado en Nature apunta a que estas cavidades especialmente diseñadas ayudan a los animales infectados a combatir el hongo quitridio, también conocido como Batrachochytrium dendrobatidis (Bd).
Los hallazgos de esta investigación, impulsada por la Universidad Macquarie (Australia), ayudarían a poblaciones en rápido declive como la rana campana verde y dorada (Litoria aurea), que ha desaparecido de más del 90% de su antigua área en el país.
Fácil y barato
Saunas de ladrillo diseñadas ad hoc
“Nuestros resultados son los primeros en proporcionar una estrategia simple, económica y ampliamente aplicable para proteger a las ranas contra esta enfermedad”, sostiene Anthony Waddle, becario científico Schmidt en Applied BioSciences de la Universidad Macquarie y autor principal del estudio.
El equipo de investigación diseñó unos refugios artificiales construidos con materiales fácilmente disponibles, como ladrillos e invernaderos de PVC. Una solución rápida, barata y fácil de conseguir, lo que aceleraría la recuperación y protección de estos animales, sostienen los investigadores.
Estas saunas atrajeron a las ranas y les permitió alcanzar temperaturas corporales lo suficientemente altas como para eliminar las infecciones. Además, una vez recuperadas desarrollaron inmunidad a la quitridiomicosis, incluso en condiciones frías que son óptimas para el crecimiento de hongos.
“Todo esto es como un mini spa médico para ranas”, sostienen los responsables de la investigación, que pone en valor el hallazgo porque, de las especies afectadas por quitridio en todo el mundo, 90 % se han extinguido o se presume extintas en la naturaleza.
Conservación
Solución a corto plazo para las ranas
“La quitridio no va a desaparecer, pero nuestra intervención de ecología conductual puede ayudar a los anfibios en peligro de extinción a coexistir con la quitridiomicosis en sus ecosistemas”, sigue el profesor Rick Shine.
El estudio también demostró que las ranas que sobreviven a una infección por quitridio pueden desarrollar una forma de inmunidad adquirida, haciéndolas más resistentes a futuras infecciones.
“Reducir las tasas de mortalidad y aumentar su inmunidad al quitridio es la clave para proteger a los anfibios de esta enfermedad, que ahora es endémica en todo el mundo”, concluyen.