Nuevo jarro de agua fría para las fuentes renovables en Catalunya. Ni la situación de emergencia climática logra despejar claramente el camino a las energías limpias. El Departament de Territori i Sostenibilitat ha rechazado el proyecto de construcción de la que estaba llamada a ser la planta fotovoltaica de autoconsumo más grande de Catalunya, promovida por el empresario Joan Vila en Beuda (la Garrotxa).
La ponencia que ha analizado el proyecto ha emitido un dictamen desfavorable a partir del informe de los servicios territoriales del Departament d’Agricultura en Girona.
Este informe argumenta que el suelo seleccionado está clasificado como terreno no urbanizable agrario protegido (aunque el lugar no está siendo cultivado).
Y, en este sentido, subraya que la ley de Espais Agraris destaca la importancia de las superficies agrícolas “para la producción de alimentos, la sostenibilidad del sector primario y el equilibrio territorial”.
El dictamen justifica la negativa invocando también “la falta de una propuesta y evaluación de alternativas al emplazamiento”
El dictamen justifica la negativa invocando también “la falta de una propuesta y evaluación de alternativas al emplazamiento”.
“No se han podido evaluar otros lugares como posibles emplazamientos, por ejemplo, más cerca de las instalaciones” industriales a las que se prevé suministrar energía o que no supongan eliminar la vegetación arbolada, dice la resolución.
El dictamen también reclama un mayor nivel de concreción sobre la superficie arbolada afectada o sobre cómo se piensa “reemplazar” o compensar esta masa forestal. También se dice que “no se especifican las medidas de integración paisajística para dar cumplimiento a las directrices del paisaje” de la actual normativa.
Ayuntamiento avala la idoneidad del emplazamiento y el interés público que supone fomentar las energías renovables
La decisión del Govern ha provocado una importante conmoción entre los partidarios del fomento de las energías renovables y en las entidades promotoras de la declaración de emergencia climática en Catalunya.
Todos estos sectores pensaban que las trabas que obstaculizan sistemáticamente el impulso de las fuentes renovables desaparecerían con el nuevo decreto de implantación aprobado por el gobierno catalán el año pasado. Pero no ha sido así.
El referido decreto creó una ponencia encargada de tramitar por la vía de urgencia estas peticiones.
Sorprende también la decisión por cuanto el Ayuntamiento de Beuda subraya que el terreno elegido (no urbanizable) es especialmente idóneo para acoger equipamientos de interés público, como lo son las instalaciones de producción de energía con fuente renovables.
La planta fotovoltaica no afectaría a espacios valiosos por su fauna, su flora o por ser un lugar estratégico como conector biológico, dice el dictamen.
Este proyecto de autoconsumo quería ser un referente, un modelo de transición energética válido para muchas empresas”
Joan Vila, un industrial que había promovido la planta para abastecer su industria (LC Paper), ha expresado su sorpresa por la decisión del Govern. “No daba crédito a esta denegación”, ha indicado, convencido de que, después de años de trámites y gestiones, su proyecto iba llegar a buen puerto.
“Este proyecto de autoconsumo quería ser un referente, un modelo de transición energética válido para muchas empresas”, indica. “Este era un modelo que podría ser replicado en otras industrias”, añade.
“Este proyecto permitía resolver un problema territorial en un espacio no productivo: el campo en cuestión no tiene una producción agrícola suficiente para pagar el alquiler, por lo que la instalación fotovoltaica resuelve su viabilidad”, señala Vila.
La producción sería aprovechada de manera instantánea en la fábrica
La planta fotovoltaica (de 3 MW de potencia), situada a 90 metros de la fábrica (y en unos terrenos alquilados), ha sido diseñada para generar electricidad consumida de manera instantánea en la fábrica. La previsión era que pudiera aportar el 22% del consumo eléctrico de la fábrica.
La producción anual programada equivaldría al consumo de entre 1200 y 1500 familias, nos informa Manuel Romero, delegado de Unef (sector fotovoltaico) en Catalunya.
“La ley nos obliga a que perdamos la mínima superficie agraria posible. El dictamen es desfavorable porque no se ofrecen otras alternativas de emplazamientos, y eso es lo que les pedimos”, señala a este diario Oriol Anson, director general de Desenvolupament Rural.
La ley nos obliga a que perdamos la mínima superficie agraria posible”
Anson señala que “no estamos en contra del proyecto”; y que no es descartable que si no se encuentra un emplazamiento alternativo mejor, se acepte este primer lugar escogido.
Sorprende que la Administración sugiera un emplazamiento alternativo, teniendo en cuenta las características propias de una instalación de autoconsumo, que se define en sí misma por producción la electricidad para ser generada y consumida in situ.
El director general de Desenvolupament Rural apunta que sería injusto que “Agricultura apareciera como el malo de la película”, teniendo en cuenta que hay abundantes objeciones paisajísticas (aportadas por el Departament de Territori), aunque opina que las carencias en este orden serían subsanables en su opinión con medidas compensatorias o correctoras.
El promotor sostiene que producir electricidad en forma de autoconsumo al lado de las fábricas puede ser una fórmula para el regreso de la industria a territorios rurales
Joan Vila sostiene que la idea de producir electricidad en forma de autoconsumo al lado de las fábricas puede ser una fórmula para el regreso de la industria a las zonas del territorio rural que tienen suelo, agua y espacios accesible.
“Catalunya debe abordar este debate: o mantenemos el mundo rural intocado, con los agricultores en queja permanente y sin hacer nada, o logramos desarrollar nuevas actividades, industrias y dar un impulso a las fuentes renovables para complementar las rentas del mundo rural”, dice a este diario Joan Vila, reconocido experto en el mundo de la energía.
“Montar un parque fotovoltaico de media potencia con la mirada puesta en 25 años es la mejor manera de trabajar por el territorio, dejando la especulación financiera de lado”, ha indicado Vila en un articulo publicado en el Diari de Girona.