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Interceptados dos kilos de coral rojo extraído ilegalmente en el Cap de Creus

Especie amenazada

Algunos de los coraleros tenían licencia del Ministerio de Agricultura para poder explotar el recurso, pero no en las aguas de competencia de la Generalitat

Coral recuperado .

Una acción capitaneada por diversas instituciones y fuerzas de seguridad ha permitido decomisar tres sacos de coral rojo -con un peso de 1,8 kilos- escondidos en una cala del Cap de Creus y que contenían 150 colonias de esta especie.

En esta actuación ha intervenido la Direcció General de Pesca y ha sido coordinada con diferentes unidades de los cuerpos de Mossos y Agentes Rurales.

El coral había sido extraído ilegalmente del cabo de Creus por un grupo de coraleros; algunos de ellos tenían licencia del Ministerio de Agricultura para actuar pero no en las aguas interiores, de competencias de la Generalitat

La actuación de vigilancia e inspección tuvo lugar en el Parque Natural de Cap de Creus, espacio provisto de un Plan especial de protección del medio natural.

Sobreexplotación. Un agente rural destinado a la vigilancia marina muestra cómo era un coral en los años 60 y cómo es ahora, en una foto de archivo

El operativo, resultado de varios días de control y vigilancia en la zona, ha requerido el uso de medios tanto terrestres como acuáticos, e incluso efectivos aéreos.Un helicóptero pudo filmar todo el operativo.

Los infractores fueron interceptados en una cala donde habían aparcado sus vehículos. Los coraleros llevaban equipos de inmersión, pero sin ningún tipo de captura.

Paralelamente, y lo largo de todo el operativo, las unidades actuantes custodiaron la cala donde se sospechaban que podían haber escondido el coral extraído.

Un total de 150 colonias

Y fue, finalmente, a última hora de la tarde del miércoles cuando se hizo el hallazgo de los tres sacos, que habían escondido a unos 5 metros de profundidad y que contenían unas 150 colonias de coral, con un peso total de 1,860 kg.

Moratoria de 20 años, hasta 2027

La Generalitat fijó un veto a las extracciones para proteger la especie entre el cap de Begur y Francia

Para el éxito de la actuación ha sido necesaria la coordinación de un dispositivo formado por inspectores de la Direcció General de Pesca i Afers Marítims en la demarcación de Girona, el cuerpo de agentes rurales y el cuerpo de Mossos mediante sus diversas unidades en Girona.

Todo ello obligó a cubrir todos los turnos posibles durante varias jornadas.

En este sentido, las autoridades han destacado la complejidad de las actuaciones de control e inspección de esta actividad en Catalunya, ya que la existencia de coraleros autorizados en el litoral catalán hace que se tenga que cubrir extensas zonas terrestres y marítimas del territorio de forma casi simultánea para verificar que el coral se ha extraído de la zona vedada.

Veto de la Generalitat: de Cap de Begur a Francia

El Departamento d’Agricultura estableció en 2017 una moratoria a la extracción de coral hasta finales del año 2027 en las aguas interiores: la zona situada entre el cabo de Begur y la frontera con Francia.

Se tomó esta medida siguiendo la principal recomendación de los expertos, que propusieron declarar una moratoria de la pesca en toda la costa catalana durante 20 años renovables.

La otra cara de la moneda

El Ministerio de Agricultura autorizó las capturas en aguas adyacentes, y desoyó la recomendación de los expertos, que pidieron extender la prohibición a toda la costa

Así lo reclamó un informe de 14 expertos de 5 instituciones científicas de reconocido prestigio, que consideró necesario actuar con urgencia para salvar esta especie (Corallium rubrum) en el litoral de Catalunya.

Sin embargo, desgraciadamente, el Ministerio de Agricultura, haciendo una interpretación muy restrictiva de la normativa catalana, otorgó 12 licencias para pescar en las aguas exteriores de Catalunya entre el cabo de Begur y Arenys de Mar en los años 2018 y 2019.

La Generalitat ha venido sosteniendo, sin embargo, que para que su medida fuera eficaz era es necesario que la protección no se limitara a las aguas interiores competencia autonómica, sino que se “extienda también a las aguas exteriores adyacentes, tal y como ya prevé la normativa en vigor”.

Actividad bajo el mar, esa es la dificultad de control

La extracción de coral es una actividad que se realiza en el mar y a mucha profundidad, lo que dificulta mucho el control y la vigilancia, tanto para llevar a cabo el seguimiento y control in situ como cuando, una vez extraído del medio, el material es interceptado ya sea por mar o en tierra. En estas circunstancias es muy difícil poder determinar su origen (sabe si procede de aguas autonómicas o aguas estatales)

Por ello, la existencia de coraleros con licencia para extraer coral en aguas exteriores en Catalunya ha añadido dificultades al control y la inspección de esta actividad extractiva.

Una vez en superficie, no se puede acreditar el lugar de extracción y por tanto no se puede acreditar la infracción.

La Generalitat informó en todo momento la Administración del Estado de la situación y la necesidad urgente de protección, y solicitó por diversas vías la modificación de la orden que deja abierta ahora la opción a que se pueda extrae coral en una parte del litoral catalán. Tambén se reclama la derogación de la resolución de otorgamiento de las licencias a estos corales, pero no ha obtenido respuesta satisfactoria.