El aumento del precio del combustible ha afectado claramente al bolsillo de los españoles, acostumbrados a tener una de las tarifas más interesantes de Europa. De hecho, algunos ciudadanos están limitando el uso del vehículo privado para contener la factura de carburante a final de mes. Si bien ya se ha comenzado a aplicar una reducción temporal de 20 céntimos en el precio del litro de gasolina y diésel, para muchos conductores esta rebaja no es suficiente. De cara a las vacaciones de Semana Santa, y pensando en aquellos que van a disfrutarlas en autocaravana o camper, ofrecemos una consejos para conducir de manera más eficiente y visitar menos la gasolinera.
Hace apenas un mes nos lamentamos de que la gasolina alcanzaba un precio medio de 1,55 euros el litro, y poco después ya se situó en torno a los dos euros. Los factores sociopolíticos actuales, e incluso logísticos a nivel global, auguran una temporada tensa y volátil más larga de lo esperado.
¿Cuánto consume una autocaravana?
Rebajar el impacto negativo del aumento del combustible en nuestra cuenta corriente es más fácil de lo que puede parecer, también durante nuestros trayectos en autocaravana y camper. Este tipo de vehículo de ocio tiene un consumo más elevado que un coche por atributos lógicos, como su peso, dimensiones y aerodinámica. Otro factor que afecta directamente al gasto de carburante es la motorización que monte bajo el capó, que suele rondar los 130 CV de potencia.
El consumo medio de una autocaravana oscila entre los 11 y 12 l/100 km, excepto los modelos más compactos y de última generación. Estos últimos se aprovechan del conocimiento de las firmas de la automoción en el ámbito de la tecnología sostenible de sus bloques, utilizando sistemas como la desconexión de cilindros o aditivos como el AdBlue.
De todos modos, independientemente de si el vehículo es nuevo o viejo, los siguientes consejos ayudarán a superar una Semana Santa histórica por el precio del combustible.
Puesta a punto
La intención de todo campista es alargar la parada en la gasolinera, algo para lo que es esencial conocer algunas técnicas, pero también mantener un correcto mantenimiento de las piezas mecánicas que componen el sistema de propulsión. Más allá de la seguridad, que también debería estar en tu lista de prioridades, el óptimo rendimiento del bloque requiere de cuidados que entendemos como “puesta a punto”. Es más, esta atención te ayudará a reducir la aparición de pequeños fallos que pueden acabar siendo críticos.
Algunos talleres como First Stop ofrecen servicios de descarbonización mediante los que se eliminan los residuos acumulados en el vehículo, también en el caso de los campers y autocaravanas. Se trata de un proceso de “limpieza” de impurezas, como haríamos con nuestro cuerpo cuando ayunamos o tomamos batidos que nos ayudan a depurar los órganos.
Una correcta revisión de los elementos móviles como las suspensiones, rozamiento de pastillas o zapatas de freno nos permitirá tenerlo todo ajustado para reducir la resistencia a la rodadura y, por ende, el consumo. El filtro del aire, que se encarga de filtrar el aire que entra al conducto de admisión, es otra de las piezas importantes para que el motor nos conceda todo su potencial. Llevarlo limpio es esencial para mantener un gasto correcto y lógico de combustible.
Apagar el motor en las paradas
Como comentábamos al inicio del artículo, los fabricantes de autocaravanas y campers desarrollan sus módulos sobre chasis de vehículos comerciales conocidos. Ejemplo de ello es la Fiat Ducato, el chasis más utilizado y fiable para la adaptación de habitáculos como autocaravanas. Por ese motivo, las propias marcas se benefician de sistemas de vanguardia como el Start&Stop. En caso de no tenerlo, o ser un modelo viejo, te recomendamos parar el motor en los instantes de estacionamiento largo.
Utilizar el freno motor
Durante la conducción es vital conocer las inercias y reacciones del furgón, con el peso que se suma al contar con el equipamiento, mobiliario y las personas del interior. Una vez seamos conscientes de ello podremos aprovechar el freno-motor para disminuir la velocidad de manera paulatina ante, por ejemplo, semáforo en ámbar. Esta técnica consigue reducir el consumo en un 2%.
Conducir con suvidad
El tacto y la suavidad es la primera lección para reducir el consumo. Evitar los acelerones imprevistos, y mantener la zona del cuentavueltas (rpm) en un rango cómodo para el propulsor, evitará que se dispare el gasto. También es mejor no alargar las frenadas y quedarse por debajo de la velocidad máxima permitida, en caso de ser un camper. Según First Stop, sobrepasar la velocidad puede aumentar en un 20% el gasto de crudo del motor. Las autocaravanas tienen su propio marco legal, tal como te contamos en artículos de esta sección.
Presión adecuada de los neumáticos
La importancia de los neumáticos vuelve a salir a la palestra con el consumo y la eficiencia. Además de ser el único elemento en contacto con el asfalto, y por ello el más relevante a la hora de hablar de seguridad, también es clave para reducir el gasto. La presión debe ser la correcta para evitar la resistencia a la rodadura, minimizando el esfuerzo que hará el bloque para mover todo el conjunto en caso de llevarlas desinfladas. Los materiales de la goma impactan también en ese consumo y existen neumáticos específicos para la eficiencia.